TE ST IM ON IO Nuestr@s soci@s nos cuentan sus vivencias con el Covid-19 P R I M A V E R A 2 0 2 0 | CORONAVIRUS ( c ) ALCER Salamanca 2020 HOLA Editorial Tiempos duros, raros, de ciencia ficción, como bien dice Toñi. Hace ya 2 meses que estamos confinad@s en casa para proteger y protegernos del Coronavirus. Algunos de nosotr@s soportan mejor que otros estar encerrados y luego también hay soci@s que han dado positivo en Sars-CoV-2, un@s sin síntomas pero otr@s incluso ingresad@s. Much@s tenemos la necesidad de hablar, de contar cómo estamos viviendo estos momentos, pero también de escuchar para saber que no lo estamos pasando sól@s y por eso se ha creado esta publicación. Para poder expresarnos y para asimismo entretenernos un poco. Gracias a tod@s l@s que habéis contribuido para crear este trabajo. También encontrarás mi vivencia dentro de esta publicación. No te pierdas ninguna historia... ¡ALCER Salamanca, siempre trabajando para ti! ¡Todo pasa y vamos por buen camino! J u a n C a r l o s S á n c h e z M a t a s Vicepresidente CONTÁCTANOS ALCER Salamanca Avd. Italia 8 1º, oficina 6 37006 Salamanca teléfono 669 049 042 alcersalamanca@alcer.com EDITORIAL Juan Carlos Sánchez Matas CONTRIBUIDORES Nuestros Socios y Socias, Voluntarios y Voluntarias TESTIMONIO | 3 ALCER Salamanca, Primavera 2020 ACLARACIÓN Coronavirus Nombre del virus Sars-CoV-2 Nombre de la infección Covid-19 Nombre de la enfermedad Página #mequedoencasa 2 Editorial 3 Índice 4 FBH 5 Felis 6 Positivo 7 Toñi 9 10 Servicios de ALCER Salamanca 11 nunca caminarás solo 12 Helen Trex 14 Somos lo que necesitas 15 Sentir 16 Comprensión 17 Asintomático 18 T-CR 19 Arbol 20 MicroRrelato 22 Sanidad Pública 23 Mi camino hasta aquí 24 Teléfonos útiles 26 TESTIMONIO | 4 ALCER Salamanca, Primavera 2020 ÍN DI CE Soy paciente de peritoneal. Es verdad que este virus nos prueba la fortaleza. A pesar de todos los cuidados en casa, he cogido un virus. Llamé al teléfono de asistencia de Coronavirus de CyL y me dijeron que lo considerarían posible caso de Coronavirus. No he tenido fiebre, pero cada día tenia un síntoma distinto y preocupante. Pinchazos en la nuca, fuertes dolores de cabeza de noche, tos, mareo, cansancio... Pero lo que más me angustió fue un dolor en el centro del pecho, que persistía varios días. Llamé a nefrología y mi angustia aumentó cuando me dijeron que Chelo estaba de baja y la enfermera que quedaba solo decía que con esos síntomas no fuera por allí. Al final, me pasó a mi nefrólogo y me dijo que posiblemente era pericarditis y que no era grave. Me añadió una pastilla para la tensión, que estaba muy alta y me dijo que si me podían hacer un electro en mi centro de salud, que preguntara . Me tranquilizó. Desde ese día, la tensión sube y baja como una montaña rusa. Desde el centro de salud, solo preguntan los síntomas y los apuntan. Pregunté si se podía hacer un electro allí y me dijeron que no. Lo que cuento no lo hago como queja al sistema sanitario. Seguro que mi caso es una pequeñez para lo que se está viviendo en estos momentos en los hospitales. Pero sí que es verdad, que al sabernos frágiles por depender de la sanidad para sobrevivir y ver que la sanidad está saturada, me he sentido como un naufrago a la deriva. Ya llevo ya 8 días desde los primeros síntomas y veo la luz. Me siento mejor. Ojalá vuelva todo pronto a la normalidad. No nos damos cuenta de los cuidados que nos tienen a los pacientes renales hasta que pasan momentos como este. FBH TESTIMONIO | 5 ALCER Salamanca, Primavera 2020 ESTOY EN CASA DESDE EL DÍA 14 DE MARZO. SOLAMENTE HE IDO UN DÍA A LA FARMACIA. MI FAMILIA TRAE LA COMPRA. LOS DÍAS VAN PASANDO Y LO QUE DESEO ES VOLVER A INCORPORARME CUANTO ANTES AL TRABAJO. Y TAMBIÉN PASEAR, SOY ADMINISTRATIVO. ¡SUERTE A TODOS! F E L I S TESTIMONIO | 7 ALCER Salamanca, Primavera 2020 POSITIVO Trasplantado Renal Lo típico al principio, comenzamos el confinamiento en casa en sábado, cuando el gobierno decretó el estado de alarma. Los primeros días bien, normal, pero luego comencé con un poco de fiebre y tos. Empecé con Paracetamol. No lo achaqué para nada al Coronavirus. El sábado siguiente, con la fiebre ya pasando de 38, llamé al teléfono de Coronavirus del SACYL. Tardaron un buen rato en cogerme la llamada. Me hicieron unas preguntas y el hombre me vino a decir, por varias veces, que estuviera tranquilo, que lo mío era una gripe normal, y que el lunes llamara yo a mi centro de salud para que de todos modos me hicieran el seguimiento. Los siguientes 4 días fueron así, me llamaban, preguntaban, me habían dicho que por ser de riesgo por el trasplante renal me iban a mandar a alguien a casa para hacerme el test, pero no llegaron a ir. Seguía con fiebre y a veces tos, de la falta de respirar bien no era muy consciente. El jueves me vine al hospital por Urgencias. Me hicieron poner en casa mascarilla y guantes. Ya en Urgencias, aunque tenían mucho jaleo, me atendieron rápido: analítica de sangre, de orina, vía en el brazo, saturación de oxígeno, que estaba baja, tensión, test de Coronavirus y placa del pulmón que detectó que tenía neumonía. Me pasaron a una cama en una habitación de la planta baja y allí me tuvieron todo el día y toda la noche, con el oxígeno puesto en la nariz, que me la secaba muchísimo, la mascarilla, los molestos guantes que me hacían sudar las manos y sin comer ni beber agua, sólo me dieron un vaso al cabo de horas, de tanto insistirle. ¡¡¡Vaya horas más chungas!!! ¡Todo dolorido y desangelado! Por fin el viernes a media mañana me subieron a la sexta dónde voy recuperándome de la neumonía, a base de seguir con el oxígeno, y con medicamentos como antibióticos y corticoides. Es lento, pero vamos cada día estando un poco mejor. Y ahí está la esperanza. Lo malo también del Covid-19 es lo muy contagioso que es. Por eso el personal de enfermería, auxiliares, celadores, limpieza, todos, van tapados, forrados enteros, que no sé ni cómo pueden trabajar. Nosotros, con el añadido de nuestro tema renal recuperamos más lento pero lo estamos logrando. ¡ FUERZA Y MUCHO ÁNIMO A TOD@S! TESTIMONIO | 8 ALCER Salamanca, Primavera 2020 2ª parte LAyer por la tarde, a eso de las cuatro, por fin salí del hospital. Me dieron el alta, después de 2 semanas de lucha contra el puñetero Coronavirus. Y la verdad, ¡fue un momento super emocionante! Todo el personal de allí me aplaudía, alegrándose de corazón por mí salida. Lo han hecho con toda la gente. Y es que para médicos, enfermeras, auxiliares, personal de limpieza, celadores, para todos un nuevo alta es una satisfacción grande, ¡un enorme triunfo! Yo, sólo tengo palabras de agradecimiento para ellos, me han tratado fenomenal y me han cuidado como lo que son, unos super profesionales, cuando además sus condiciones de trabajo no eran las más cómodas puesto que iban protegidos totalmente y no se podían manejar con comodidad. ¡¡¡Gracias infinitas!!! Te das cuenta que debemos cuidar y proteger nuestra Sanidad. Y qué decir de la familia y las amistades, los compañeros del teatro y de la Asociación ALCER Salamanca, todos pendientes a diario de mi evolución, preguntando, dándome ánimos y fuerzas. Para todos también, ¡¡¡racias infinitas!!! Me he sentido acompañado, protegido. Ahora estoy en la Hospedería Fonseca pasando aquí una cuarentena de diez días. Me encuentro muy bien y el recibimiento y trato también está siendo excelente. ¡Enormes gracias también! En momentos así te das cuenta todo lo que las personas podemos ser capaces de hacer. Ya queda menos para que está pesadilla pase para todos y podamos volver a la normalidad. Mucho ánimo y paciencia para todos, ¡que ya queda menos! Por último recordar algo también muy importante: "Donar órganos, es regalar vida" Familia de ALCER Salamanca! Soy la hija de un paciente trasplantado hace 6 meses Agradezco enormemente el apoyo, aliento y toda la información que difunde ALCER Salamanca a través de las redes. Muchas gracias a todos y en especial al administradores, que nos tienen puntualmente informados. Para mi padre y nuestra familia el trasplante de riñón ha supuesto un antes y un después. Mi padre se ha visto libre de acudir a sus sesiones de diálisis, pero el resto de la familia, es decir esposa e hijas nos hemos visto involucradas de tal forma que nos ha cambiado la vida por completo. Los primeros días fueron muy difíciles, el riñón no funcionaba adecuadamente. Pasó algún tiempo hasta que empezó a funcionar. La herida no cicatrizo bien. Pasó mucho tiempo hasta que se cerró. El riñón seguía funcionando pero no como debiera.Eso ha supuesto acudir a consulta de urología día sí y otro también. Además de las revisiones en nefrología. Mi padre siempre ha sido optimista y creo que eso le ha ayudado mucho. Ha estado con una sonda hasta hace unos días, durante 3 meses. En la última revisión de nefrología, ya se oía hablar del Coronavirus, pero parecía que eso no nos tenía que preocupar mucho. Mi padre siempre ha llevado una vida muy activa, entraba y salía de casa a diario y varias veces al día, incluso cuando estaba en diálisis. Le cuesta mucho asimilar y comprender que la situación es grave y que él en particular es una persona de alto riesgo. Hasta que el gobierno declaró el estado de alarma él seguía haciendo su vida normal. Yo estoy en mi casa desde el pasado 14 de marzo y me ocupo de él y de mi madre.Nos cuesta mucho hacerle entender que no puede y no debe salir, pero él no lo entiende o no lo quiere entender. Tiene 78 años, yo comprendo que esta situación es incomprensible para todos, parece el guión de una película de ciencia ficción. ¡MUCHO ÁNIMO PARA TODA LA FAMILIA ALCER! TOÑI TESTIMONIO | 9 ALCER Salamanca, Primavera 2020 Desde que me encerré el pasado 13 de marzo después de la reunión de la Junta Directiva de ALCER Salamanca, donde decidimos cancelar todos los eventos y cerrar nuestra oficina, la verdad que aburrirme nada de nada. Me he dedicado a ver un montón de películas y alguna serie. Miles de llamadas y videollamadas (ahora todo el mundo tiene tiempo y se acuerda de llamar) me han entretenido también. Me he informado hasta el fondo sobre el Coronavirus y he seguido los datos y las noticias de España, Castilla y León y la provincia de Salamanca. Esto me ha ayudado a informaros a través del grupo de WhatsApp de Soci@s y redes sociales. Estar pendiente de vosotr@s, intentando resolver cada uno de vuestros problemas, me ha hecho sentirme vivo. Pero también he estado muy asustado y agobiado durante la segunda semana del confinamiento. Entonces fui consciente, de que había estado en contacto intenso con al menos dos personas que habían dado positivo en el test de Sars-CoV-2 y que habían desarrollado la enfermedad. Al pasar las dos semanas de no haber vuelto a ver a esas dos personas, ya me relaje. O no había pillado el virus (más probable) o no había desarrollado síntomas (casi imposible). También en mi familia hay una persona con el Covid-19 que lo ha pasado muy mal, aunque ya casi está recuperado. Y tod@s nuestr@s soci@s, que bien dieron positivo en el test o están en casa por tener síntomas, me han preocupado todos los días. Algun@s ya están bien otr@s siguen ahí peleando. Algunas peticiones de ayuda y una muerte me han emocionado enormemente. Seguiré con este ritmo de entretenimiento con ver pelis y videollamadas, ayudando y apoyando en la misma medida a la familia de ALCER Salamanca hasta que ya por fin vaya normalizándose la situación, que ya queda menos... TESTIMONIO | 10 ALCER Salamanca, Primavera 2020 NUNCA CAMINARAS SOLO Y es verdad. En la vida, tanto en los buenos momentos como en los menos buenos, siempre tenemos cerca a las personas que son importantes para nosotros o a las personas para las que nosotros somos importantes. Y es verdad. Yo he sufrido esta terrible enfermedad del Coronavirus. Los días que he estado ingresada en la 7ª planta del Hospital Clínico, lo he pasado mal: he tenido dolores, muchas dificultades para respirar, me costaba la misma vida tener que ir andando de la cama al cuarto de baño -¡y sólo eran cuatro pasos!-. Son muchas las personas que han sufrido, están sufriendo y sufrirán esta pandemia o están pasando por otras enfermedades más duras que la mía. Es duro y, a veces, te faltan fuerzas para seguir adelante. En estas circunstancias, cada uno busca un asidero al que agarrarse, una luz que le guíe entre tanta penumbra para seguir adelante. Tengo que dar las GRACIAS a mucha gente. En primer lugar, al personal que me ha atendido durante este tiempo en la 7ª planta del Hospital Clínico. Desde el mismo momento en que ingresé, me he sentido cuidada, protegida por todos ellos. Su profesionalidad, dedicación y entrega han sido insuperables. Sin la posibilidad de trabajar en las mejores condiciones, han sido capaces de dar todo por todos nosotros. TESTIMONIO | 12 ALCER Salamanca, Primavera 2020 Nunca olvidaré sus palabras de ánimo y sus caras de alegría cuando te veían que ibas mejorando y se acercaba el momento de darte el alta. Los aplausos que recibí en el momento que me la dieron, me han dado la fuerza suficiente para seguir recuperándome en casa. Estaba tan emocionada, que sólo pude llorar. Se me olvidaron dos cosas: una, aplaudirles a ellos; la otra, dedicarles el himno del Liverpool “Nunca caminarás solo”. Al Dr. Agustín, mi médico de cabecera. Todo un profesional, tanto en estos momentos complicados como en toda la labor que lleva a cabo. Un médico de vocación. Sus llamadas me tranquilizan porque me dan la seguridad de que hay alguien pendiente de mi salud. A mi familia -¿qué puedo decir?- siempre están donde tienen que estar. El pertenecer a una familia numerosa tiene sus ventajas: cuando uno está más bajo, decaído o necesitado de ayuda, siempre están los demás para tirar del carro con fuerza. A los amigos incondicionales, que sabes que están ahí siempre. A Juan Carlos, que ha representado tan dignamente a ALCER en estos momentos tan difíciles. Ha estado siempre al pie del cañón, informando, solucionando problemas, aclarando dudas y, lo más importante, estando siempre pendiente de los “alcerinos” que necesitaban ayuda de la Asociación. A los pacientes renales y a los familiares que están pasando por esta enfermedad les deseo mucha fuerza y mucho ánimo. Este virus no sabe con quién está jugando. Estas personas son duras de pelar y llevan muchas batallas ganadas. Para la gran familia que es ALCER Salamanca, sólo tengo palabras de agradecimiento. ¡Es tanto lo que me han dado en la vida! Y para terminar, sólo recordaros una cosa: ¡NUNCA CAMINARÁS SOLO! TESTIMONIO | 13 ALCER Salamanca, Primavera 2020 ¡Desde hace 24 años de la mano de ALCER Salamanca y desde hace un par de ellos en Club Deportivo ALCER Salamanca cómo animadora! Hoy me han pedido que escribiera cómo estoy llevando esto de estar confitada, ups perdón. Confinada en casa: Pues a ver, los primeros días fueron raros. Tengo a Tesa, mi perra, y claro, teníamos que salir con ella - palabrita, sólo dos veces al día y nada de paseos-, luego decidimos llevarla al pueblo. Ves como los planes que tenías y en los que tenías puestas las ilusiones se desvanecen y se aplazan en el mejor de los casos, pero "the show must go on". Las clases continuaron, por lo tanto, nos convertimos en auxiliares técnicos de materias de plan curricular adaptado a confinamiento en primero de la E.S.O., lidiar con una preadolescente es lo que tiene... A la par, y dado que siempre me ha gustado la cocina, me volqué en una de mis ramas frustradas: la panadería. Sí, lo reconozco, soy de esas que ha ido buscando harina de fuerza, los primeros días levadura y ahora alimento con mimo y esmero (y temperatura y tiempo según el maestro panarra Iban Yarza) un tarro de cristal con vida dentro: mi masa madre, del que, tanto mi marido como mi hija están siendo conejillos de indias o de panes, según se mire. Las hogazas, baguettes, bollos fluyen en el horno cada día probando tiempos de fermentación, levados, harinas varias... Y como hay que sacar tiempo para todo, jugamos al ping-pong en la mesa del comedor, juegos de mesa variados, mucha lectura y relectura y más cocina para llevar a la bisabuela. Ir de compras un día a la semana para los abuelos, ir a ver a mis perretes, y por supuesto, leer todo lo que me pasan desde ALCER Salamanca, y el Club Deportivo ALCER Salamanca ¡ Cuídense mucho alcerian@s! HELEN T-REX TESTIMONIO | 14 ALCER Salamanca, Primavera 2020 Paciente renal, somos lo que necesitas La asistencia e información a los pacientes de riñón en sus aspectos médico y social, especialmente en lo concerniente al fomento y proporción de esa asistencia por facultativos y personal sanitario especializados. El fomento de la investigación de los problemas que plantean las enfermedades renales en sus aspectos médico-asistenciales y socio- económicos, así como de la prevención de las mismas. La divulgación sanitaria popular para dar a conocer la existencia de estas enfermedades y sus posibles soluciones terapéuticas, así como sus múltiples aspectos sociales y jurídicos. ALCER Salamanca pone como objeto de la entidad “el contribuir a mejorar la calidad de vida de todas las personas afectadas de enfermedades renales, así como el asesoramiento de sus familiares y la prevención y lucha contra estas enfermedades mediante el desarrollo de todas las actividades necesarias para ello”. Como fines específicos los siguientes: La colaboración y cooperación con todas aquellas personas o entidades u organismos públicos o privados, cuya actividad puede conducir a la consecución de los fines de la Asociación, participando en la elaboración de programas y proyectos. La difusión de información acerca de la donación y trasplantes de órganos. La divulgación de los derechos que asisten a los pacientes renales. Promoción de las normas jurídicas que permitan la resolución de la problemática que afecta al colectivo. Promover la ayuda mutua y el autocuidado. Fomentar actividades de voluntariado social. Fomentar la integración social de las personas afectadas de enfermedad renal crónica, con especial atención a los colectivos de mujeres, menores e inmigrantes por su mayor riesgo de exclusión social. Y en general cualquier otra que redunde en beneficio de los pacientes de riñón. Avd. Italia 8, 1 º ofc. 6, 37006 Salamanca ⎮ ☎ 669 049 042 ⎮ alcersalamanca @ alcer.org NUEVO, DIFERENTE, TODO BIEN, A GUSTO, MUCHA MOTIVACIÓN Y ADELANTE, PASAN LOS DÍAS Y MÁS DÍAS Y MÁS... EMOCIONES FUERTES, LÁGRIMAS, SENTIDO, SIN SENTIDO, TRISTEZA, SIN FUERZAS, INFINITO... MIEDO, MUCHO DOLOR, VUELVE EL SENTIDO, LA FUERZA, DECEPCIÓN RENACER SEGUIR... S E N T I R COMPRENSIÓN Valiente no sé si soy pero desde luego he comprendido y he respetado cada medida que se ha tomado desde hemodiálisis, para protegernos. Sin ninguna duda manifestaré lo vivido sobre la dificultad de dializarnos sin las comodidades que anteriormente teníamos pero no por ello he dejado de comprenderlas. Mi experiencia durante el confinamiento ha sido muy dura, sobre todo en el tiempo que estoy en hemodiálisis. Me han quitado todas las comodidades posibles que se pueden tener durante las 4 horas. Padezco de cervicales, unos dolores muy fuertes desde que era muy jovencita y siempre he requerido durante el tiempo de diálisis una almohada, objeto que se me quitó cuando comenzó esta pesadilla. Además de ser muy friolera, también se me quitó la manta. Ya no hablar del desayuno porque lo del hambre en diálisis, es feroz. Medidas que han dificultado mi comodidad dentro de diálisis, pero que son respetadas y comprendidas bajo esta situación tan dura. En cuanto al confinamiento en mi casa, todo ha sido con mucho cuidado porque mi marido trabaja. Es personal de primera necesidad. Las salidas por mi parte han sido exclusivamente para ir a hemodiálisis. Y cada vez que hay que comprar, tomamos las medidas sanitarias correspondientes y una exhaustiva limpieza de cada producto que entra en mi hogar. TESTIMONIO | 17 September 2019 Soy transplantado de riñón y por especificar más os diré que es mi tercer transplante. Como todos confinados desde el 13 de Marzo, para ese entonces en casa ya arrastrábamos un catarro por mas de un mes que no terminaba de curar, no tenía síntomas graves y seguía trabajando con normalidad. Al ser grupo de riesgo y trabajar en la rama sanitaria, me dieron la baja por prevención en salud laboral y a los pocos días me realizaron el test, siendo este positivo. Nos cogió por sorpresa porque no presentaba los síntomas que se atribuyen al Covid-19. Mi mujer y yo llevábamos dentro del confinamiento una convivencia normal y decidimos seguir llevándola partiendo de la base que con la convivencia ya se habría contagiado y estaba totalmente asintomática. Sí tomamos precauciones como el uso individual de baños y durante 21 días dormimos en habitaciones separadas. Nos costo ponernos en contacto con nefrología para informarles del positivo y por si tuviéramos que tener en cuenta alguna pauta, ya que vivimos fuera de la provincia y ante alguna urgencia no podríamos acudir al hospital de referencia. Y no os puedo contar mucho mas, porque por suerte los síntomas siguieron siendo los de el catarro que arrastraba previamente que fue remitiendo hasta la normalidad. Un mes después me repitieron el test siendo el resultado negativo y ya me encuentro trabajando con normalidad. Eso sí, extremando las precauciones tanto en el trabajo como en casa. Daros mucho animo a tod@s l@s que lo estéis pasando peor y mucho cuidado ahora que ya empieza el desconfinamiento. ASINTOMÁTICO TESTIMONIO | 18 ALCER Salamanca, Primavera 2020 T-CR Estoy en casa confinada desde el 13 de Marzo, como todos. No he salido para nada desde entonces, ya que me jubilé en febrero. Comparto este encierro con mi marido, que cerró su negocio este tiempo para no ponerme en peligro. El sale a comprar y a todo lo necesario, con toda la parafernalia que esto supone. Ya van pesando los días... Hacemos todo tipo de actividades (deporte, cocina, lectura, series, cartas, etc.) para estar ocupados y pasar mejor este tiempo, que parece un mal sueño. Pero también estamos muy preocupados por la gente que les toca pasar por este trance. Tenemos un buen amigo en estado crítico y otro se nos fue. Nuestra hija trabaja en Madrid en una Residencia y esto es el lado peor de esta situación. Gracias ALCER Salamanca, por tenernos informados al momento de todo lo que acontece en estas circunstancias. VIVA LA VIDA TESTIMONIO | 19 September 2019 Hoy, después de casi 50 días de confinamiento, salgo a la calle a pasear. Lo primero que he hecho ha sido visitar mi árbol. Lo planté hace unos años, para que el día de mañana pueda descansar al pie de su tronco, quizá filtrarme en sus raíces, acompañar en primavera a la clorofila y viajar juntos por el interior de mi fresno, ser parte de él... y, aunque muera en otoño, esperaré a la siguiente primavera para seguir viviendo. Lo que hemos vivido estos 50 días no tiene parangón, nunca habíamos vivido nada parecido. A veces parecía un mal sueño o un castigo divino o una de esas películas americanas catastrofistas. Los primeros días fueron horribles, contagios masivos, hospitales desbordados, muertos y más muertos. Fueron días muy duros, cada vez que iba a diálisis sentía que el tenaz virus me perseguía, cada puerta que abría del hospital me daba la sensación de que el bicho se pegaba en mis manos... Veía al microscópico virus deslizarse, desde mi dedo índice hasta mi garganta, cada vez que tocaba un botón de los ascensores del Virgen Vega. Eso sí, cuando llegaba a la 9ª planta nos encontrábamos con un ejército de personas dispuestas a ayudarte en todo momento, a darte tranquilidad y a luchar contra el virus. Desde la gente que ha limpiado nuestra unidad de diálisis, pasando por celadores, auxiliares, enfermeras y médicos. Todos igual de importantes; han hecho un trabajo formidable. Sólo tengo palabras de agradecimiento, aunque ya me lo habían demostrado muchos años atrás. Una vez más: GRACIAS. Sobre el confinamiento tengo que decir que, para mí, no ha sido en ningún momento duro; soy un afortunado. He convivido con mis padres, mi sobrina Teresa y mi hermana Maite, que nos ha cuidado genial, como siempre. Quiero aprovechar este relato para dar las gracias a mi cuñado Justo, que se puso en cuarentena, viviendo él solo, para no contagiarnos, ya que por su trabajo estaba en contacto directo con la bestia. Estos días he reflexionado sobre muchas cosas, me imagino que cómo muchas personas en todo el mundo. Siempre he pensado que una de las muchas cosas por las que estamos aquí es para aprender y esto que nos ha pasado me parece que ha sido la clase magistral que nos ha dado la vida. Para eso están las desgracias, los problemas... para salir de ellos reforzados. Recuerdo que, cuando empecé con la enfermedad, me mandaron reposo absoluto, estuve tres meses seguidos sin salir de casa; tan sólo tenía 12 años. He aprovechado para leer, escribir... también he jugado largas partidas de parchís con las Teresas. En ningún momento he echado de menos la calle, porque entre otras cosas sabía que esto lo íbamos a superar. Cuando esto termine, las personas que tenemos una enfermedad crónica, como es mi caso, y el de muchos compañeros, continuaremos con nuestra particular cuarentena. ARBOL TESTIMONIO | 20 September 2019