SERIE: EL HIJO PRODIGO Mis. Carlos Ramírez -1- Sermón N° 1 «UNA ELECCION EQUIVOCADA» También dijo: Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les repartió los bienes. Lucas 15:11-12 IDEA TEOLÓGICA CENTRAL: Dios dio al hombre libre albedrio y respeta las decisiones del ser humano, a pesar que estas incluyan apartarse de su lado. I. INTRODUCCIÓN: Saludo: Buenas noches apreciados hermanos. Esta noche estamos aquí para escuchar la Palabra de Dios. Durante toda esta semana disfrutaremos juntos de una serie de mensajes basados en la primera parte de la Parábola de Lucas 15:11-24. Para esto, les invito a orar antes de abrir su Santa Palabra y estudiar el primer Mensaje para hoy. Oremos. Motivación: La Parábola de Lucas 15:11-24 forma parte de las tres que fueron contadas por Jesús en respuesta a la murmuración de los escribas y fariseos en el versículo 2 del capítulo 15: “y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come”. Jesús contó esta parábola para demostrar el gran interés de Dios en salvar a aquellos que rechazan su gracia. Aunque en aquellos tiempos pudo haber sido contada para ejemplificar la situación de los pecadores y publicanos ante Dios, hoy puede ser aplicada a nuestra realidad también, cuando elegimos voluntariamente separarnos de Dios. Proposición: Mostrar que frente a nuestra equivocada elección de desobedecer a Dios y hasta desear separarnos de él, Dios respeta nuestra decisión, aun -2- sabiendo que, esta no es la correcta y que muchas veces sus consecuencias traen dolor y miseria II. BOSQUEJO: En el escenario de la historia se presenta a un padre, su hacienda y sus dos hijos. El Texto denomina a uno “el menor de ellos” (v.12) y al otro “su hijo mayor” ‘(v.25) . La primera parte de la Parábola (que es nuestro objeto de estudio de esta semana) se centra en las palabras desafiantes y la actitud desobediente del hijo menor hacia su padre. En los dos primeros versos podemos notar que el padre es el amo y dueño de todo lo que posee, por lo tanto, sus descendientes serán los herederos futuros de sus bienes. Ambos hijos gozan de la comodidad y el cuidado del padre en casa. Sin embargo, uno de ellos, de acuerdo a la parábola: el menor, tomara una decisión equivocada la cual meditaremos a continuación: 1. “dame la parte que me corresponde”: El texto inicia diciendo en el verso 11: “Un hom- bre tenía dos hijos” Es significativo que la historia inicie enfocándose en la estrecha relación con el Padre. Como dijimos anteriormente, ambos hijos gozaban de los privilegios del hogar. Ninguno de ellos tenía necesidad de nada, ni padecían po- breza. Ambos eran los descendientes directos del padre. Lo que querían podían tomarlo. Al fin y al cabo, eran los únicos herederos de todo lo que su padre poseía. Sin embargo, uno de ellos, “el menor” (v,12) le hizo un pedido a su padre, que en realidad era de esperarse. Le dijo: “Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde”. Así como hoy, en aquellos tiempos un padre podría distribuir su patrimonio antes de la muerte. De acuerdo a la ley y la costumbre judía, el menor tenía derecho a 1/3 del patrimonio de su padre. Aunque lo ideal era que los herederos reclamasen su derecho después de la muerte del padre, este joven, pa- recía no querer vivir más en la casa. Por lo tanto, -3- pidió su herencia de inmediato para marcharse y hacer con ella lo que más le plazca. La cantidad adicional que recibía el hijo mayor tenía por ob- jeto proporcionarle los recursos necesarios para que pudiera desempeñar sus responsabilidades como jefe de familia. Si un padre tenía sólo dos hijos, como ocurrió en este caso (vers. 11), el hijo menor debía recibir una tercera parte de los bienes del padre (1/3). Sin embargo, la propie- dad familiar que se repartía mientras vivía el pa- dre, por lo general permanecía intacta hasta la muerte de éste. Pero el hijo menor exigió que se dividiera la propiedad y también que se le diera su parte. La actitud incorrecta del joven hacia su padre se puede notar en la manera como se dirige a él y le hace su pedido: “Padre, dame la parte de los bie- nes que me corresponde”. El verbo griego que se encuentra en las palabras iniciales del hijo menor hace ver que su pedido fue en realidad una or- den, una expresión imperativa “dame” (δός). El joven sabía que su padre estaba en una posición mayor, y a su vez el, como hijo, estaba subordi- nado a su padre mientras este vivía. Pero esto parecía no importarle. Se acercó desafiante- mente y exigiendo algo que, de por si era justo, pero no ideal en el momento, ordeno a su padre que le diese su herencia de inmediato. Es evi- dente que la conducta del hijo equivalía a una falta de confianza en su padre y a un rechazo to- tal de su autoridad. Aplicación: Cuantas veces actuamos de la misma manera que este hijo menor. Gozamos de las más grandes bendiciones de Dios. Gozamos de la condición de ser sus hijos. Nos brinda bie- nes y riquezas, no materiales precisamente, sino dones, que solo el puede dar. Sin embargo, a menudo creemos que es la mejor opción usar es- tas dadivas divinas a nuestra manera, a nuestro -4- gusto y nuestro capricho. Cuantas veces pensa- mos que nuestras opiniones y pensamiento son los mejor en comparación con su palabra. Cae- mos en un grave error creer que nuestra volun- tad humana es mejor su preciosa voluntad. 2. “y les repartió los bienes”: El verso 12, que presenta el primer escenario de la parábola, culmina diciendo “y les repartió los bienes”. Aunque como todo buen padre, tras su- plicarle con amor a su hijo considerar su pedido y ver su equivocada actitud, accede al final a su pedido. Divide sus bienes y riquezas entre sus dos hijos. Ahora el hijo menos tiene lo que quiere, es “libre” de hacer con ello lo que tanto ha anhelado y que a su parecer no se le ha per- mitido. Es interesante notar la expresión de Lucas para describir la repartición de la heredad. El autor bí- blico utiliza el verbo “repartió” (διεῖλεν), que puede entenderse también como “dividió”, “distri- buyo”. Este verbo se encuentra también en 1 Co- rintios 12:11 donde hace referencia a los dones espirituales que el Espíritu Santo da. Dice: “Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espí- ritu, distribuyendo individualmente a cada uno según la voluntad de Él”. Por otro lado, es importante la palabra usada para denominar estas “riquezas”. Es la palabra βίος. Que significa la “vida cotidiana y terrenal”. Aquella vida que tiene sus preocupaciones dia- rias. Aquella vida que hay que sostener con el alimento, la ropa y el refugio (2 Timoteo 2.4). aquella vida que cada ser humano posee por la gracia y misericordia de Dios. Es un don divino. Aplicación: En la vida, hay momentos cuando parece que lo mejor que un padre puede hacer -5- es que aquel hijo desobediente haga lo que quiera para que aprenda por experiencia propia cuáles son los funestos resultados de su elección equivocada. El padre obviamente no quería que su hijo se quedara en casa si el hijo no quería estar allí. No quería que se sintiera obligado. Nuestro Dios actúa de la misma manera. Antes de tomar nuestras propias decisiones, el ad- vierte, llama y suplica para cambiar de dirección. Dios siempre ha actuado, actúa y actuara así. En eso se basa su amor y su gracia. A veces en per- mitir que sigamos nuestras propias decisiones, para al final darnos cuenta cuan equivocados es- tuvimos. Dios te entrega tu juventud, tu tiempo, tus finanzas, familia, tu cuerpo, y te dice “Toma en cuenta mi palabra para hacer lo mejor con ellos”, “disfruta de acuerdo a mi voluntad lo que te he dado” pero si elegimos voluntariamente no obedecer su consejo, con lágrimas en los ojos él nos dirá: «Has como quieres hacer». III. CONLUSIÓN: 1. Resumen: El hijo menor eligió voluntariamente apartarse de la casa de su padre y su cuidado. Exigió erradamente alejarse de él. Cegado por su deseo de “libertad”, salió de casa e hirió el corazón de su Padre abandonando el hogar. Pronto se dará cuenta que esta elección ha sido la peor que ha tomado. 2. Apelación: Esta noche para finalizar quiero invitarte a meditar en las palabras de la sierva de Dios en el Libro Patriarcas y Profetas, página 766 que dice: “Cuando los hombres deciden seguir su propio sendero sin buscar el consejo de Dios, o en oposición a su voluntad revelada, les otorga con frecuencia lo que desean, para que por medio de la amarga experiencia subsiguiente sean llevados a darse cuenta de su insensatez y a arrepentirse de su pecado. El orgullo y la -6- sabiduría de los hombres constituyen una guía peligrosa. Lo que el corazón ansía en contradicción a la voluntad de Dios resultará al fin en una maldición más bien que en una bendición” (PP, 766) 3. Llamado: ¿Hay alguien esta noche que está menospreciando el consejo de Dios en su vida, y prefiere seguir las propias inclinaciones de su corazón engañoso?, Con corazón orgulloso desafía la voluntad divina y se inclina hacia los deseos de su corazón, que está en contra del consejo de Dios. Querido amigo, Dios te invita hoy a seguir por sobre todo su voluntad y hacer uso de la libertad que él te da de acuerdo a sus mandamientos. -7- Sermón N° 2 «LIBERTAD PELIGROSA» “No muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente” Lucas 15:13 IDEA TEOLÓGICA CENTRAL: Vivir apartado de Dios no tiene ningún sentido en la vida, produce sufrimiento y pérdidas dolorosas en el ser humano. I. INTRODUCCIÓN: Saludo: Buenas noches apreciados hermanos. Esta noche continuamos con nuestro estudio de la parábola del Hijo Prodigo. Hoy nos centraremos en el verso 13 de nuestro capítulo de estudio. Motivación: A menudo solemos escuchar de parte de muchos la frase conocida: “vive la vida y no dejes que la vida te viva”. Aquellos que lo pronuncian tienen la idea que el hombre debe vivir su vida como le plazca, sin depender de nadie y sin restricciones. Pero, ¿qué hay de lógico en esta frase? Absolutamente nada. Es un simple pretexto para vivir la vida como de la gana. Proposición: Mostrar que el deseo natural del ser humano es vivir lejos de Dios, sin reglas, independiente, buscando ser su propio dueño. Sin embargo, esta elección trae consecuencias tristes en la vida. -8- II. BOSQUEJO: 1. “no muchos días después” Con toda seguridad, este joven estaba desesperado por irse del hogar. Ya había exigido la herencia, y el padre con dolor se la había entregado. Sin embargo, el texto deja ver que el joven se mantuvo aun en casa por algu- nos días. La expresión: “no muchos días después” per- mite inferir que el joven se había quedado por un periodo de tiempo todavía en la casa de su Padre. Por otro lado, el modo y uso del verbo συναγαγὼν (jun- tar), también puede traducirse como “recolectar, almace- nar o convertir en dinero” (Lucas 12:17) Esto, hace notar que el joven quizá tardo algunos días para su partida con el posible propósito de vender su heredad y convertirlo en dinero, para luego partir y vivir “perdidamente”. Aplicación: Durante el tiempo que el joven tardó en casa, todavía tenía oportunidad para arrepentirse, oír al ruego de su Padre y cambiar de decisión. Pero no lo hizo. Cuán maravillosa es la gracia de Dios con el hom- bre, que a pesar que este decide abandonarle, El aun no deja de llamarle e invitarle al arrepentimiento. Este joven “junto” todo lo que había recibido. El ser humano actúa de la misma manera. Desea obtener muchas cosas y hasta recibir las bendiciones más abundantes de parte de Dios, pero tristemente decide disfrutarlas lejos de él, independiente, sin control, a su interés y desperdiciarlo todo en cosas sin sentido de esta vida como veremos a continuación. 2. “desperdicio sus bienes viviendo perdidamente” Ahora se encontraba muy apartado de casa, en otro país, otro pueblo, otras personas y sin nada ni nadie que le re- cordase a su hogar anterior ni a su padre. Así, pronto hizo amigos, y para complacerlos y complacerse a sí mismo, era necesario obviamente desembolsar lo que traía: su dinero, que con tanto entusiasmo había juntado. ¿Pero que hizo con él?, ¿Cómo lo utilizo? Es interesante notar como el autor lo describe. Lucas utiliza el verbo διεσκόρπισεν (desperdicio). Este verbo puede -9- entenderse como “dispersar, malgastar, derrochar”. Este joven no hizo un uso sabio de lo que se le había entre- gado, al contrario, gasto sin medida el dinero de manera indebida y en exceso. Desperdició imprudentemente todo lo que tenía. ¡Qué ironía! Había luchado tanto por ello y ahora lo perdía tontamente. Sin embargo, el texto señala aún más la triste realidad vi- vida por este joven. Lucas dice al final que vivió “perdida- mente”. La palabra usada para describir esta forma de vi- vir es el adjetivo ἀσώτως, que puede entenderse como vivir “desordenadamente”, inmoralmente o de forma sal- vaje”. Se volvió brutal, e incluso como las bestias que pe- recen; gasto en embriagueces, camaradería y en rame- ras (Lucas 15:30). Aplicación: La vida que eligió este joven se caracterizó por el despilfarró de sus bienes. Consideró que debía gastar sin control y que nunca se le acabaría el dinero. Este pensamiento también es común en aquellos que vi- ven lejos de Dios. Creen erradamente que lo que po- seen: la vida, los bienes, el dinero, Salud, trabajo, es para siempre y por consiguiente no les interesa como y de manera lo utilizan, A menudo se dicen entre ellos: “vive el hoy”, “esta vida es la única que existe”. De esta manera desperdician su vida, mente y cuerpo en la ba- sura de este mundo. II. CONCLUSION: 1. Resumen: Este joven tomo la decisión de abandonar del hogar. Sin embargo, para hacerlo tenía que con- vertir su herencia recibida en dinero. Este tiempo pudo ser una oportunidad para que cambiara de opi- nión, pero no lo hizo. Prosiguió en su capricho de ale- jarse del padre. Cuando lo hubo logrado partió a un país lejano y allí desperdicio su dinero desmedida- mente y sin control. No tomó en cuenta ninguna regla de vida, ni principios morales. Vivió perdidamente y a sus anchas. 2. Apelación: A los 15 años de edad, mi hermano David decidió abandonar el hogar. Dejar a nuestra madre - 10 - con un profundo dolor en el corazón y vivir lejos de casa. Fueron un tiempo difícil y de sufrimiento para nosotros. Pero mi madre no dejaba de orar e interce- der por su hijo mayor. Gracias a Dios, El señor le en- contró y le trajo nuevamente después de tres años. Él ahora es anciano de Iglesia y tiene una linda familia. 3. Llamado: ¿Cuántos en esta noche se identifican con el proceder de este joven? ¿vives apartado de Dios y consideras que lejos de él es mejor? Si es así, no si- gas más viviendo así. Deja tu vida perdida y vuélvete a Dios. Te invito a meditar en la experiencia del Hijo prodigo. - 11 - Sermón N° 3 « ¿VIVIR O SOBREVIVIR?» “Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle. Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para que apacentase cerdos. Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba” Lucas 15:14-16 IDEA TEOLÓGICA CENTRAL: Estar lejos de Dios es vivir una vida completa de pecado, miseria y esclavitud. I. INTRODUCCIÓN: Saludo: Buenas noches apreciados hermanos. Esta noche continuamos con nuestro tercer estudio de la parábola del Hijo Prodigo. Hoy nos centraremos en los versos 14 al 16 de nuestro capítulo de estudio. Motivación: La hambruna de la cual mencionó el Señor Jesús en la Parábola era común en las naciones orientales. Esta era causada por el fracaso de los cultivos, por la falta de lluvias oportunas o por la presencia de plagas o pestilencia. Una hambruna conducía al hombre a confiar en Dios y poner su esperanza en el o perder la fe. Que interesante que Jesús utilizo esta imagen en la parábola del hijo prodigo. Proposición: Mostrar que la peor condición a la que puede llegar el hombre es convertirse en un esclavo del pecado. Lejos de él solo se vive una vida de servidumbre y miseria. - 12 - II. BOSQUEJO: 1. “vino una gran hambre en aquel país, y comenzó a faltarle” Este joven pensó que su dinero le acampanaría siempre y que jamás tendría necesidad o padecería pobreza, por lo tanto, gasto libremente sin necesidad de reponerlo. De manera repentina, ahora ya no te- nía aquella fortuna. Lo había malgastado “todo”. Es allí donde empezaron las dificultades. El texto men- ciona que “vino una gran hambre (λιμὸς) en aquel país”. Pero esta hambruna no era cualquiera. En realidad, la expresión λιμὸς ἰσχυρὰ (“gran ham- bruna”), debería entenderse como una “fuerte” “po- tente” “impresionante” y “severa” hambruna. Ahora, había una completa privación y escasez de alimento (Marcos 13: 8; Lucas 4:25; 15:14; Hech 7:11; Apoc. 6: 8) en toda la ciudad. Lucas además, describe la consecuencia que pro- dujo esta “fuerte hambruna” en la vida de aquel jo- ven. Dice el “empezó a faltarle”. El modo y forma del verbo ὑστερέω (faltar) indica la idea de “fallar” o de no cumplir las espectativas que se tenia. Este joven habia probado todo cuanto quizo, mas ahora aquello en que habia depositado su confianza, se desvane- cio. Se encontraba en una condición totalmente dis- tinta a la que habia planeado y pronto se enfrentaria con la realidad. Aplicación: El hambre siempre ha sido causa de sufrimiento y dolor en el ser humano. Pero a veces este puede llegar a producir el deseo de buscar a Dios en esas circunstancias tan difíciles. El gran hambre que ahora sufría este joven era una muestra de su equivocada elección y una invitación a recapa- citar y volver a casa. Dios actúa de la misma manera con el pecador. Cuando todo se desvanece, le mues- tra su necesidad, su vacío de corazón que hay en él, con el propósito de llevarlo al reconocimiento de su - 13 - necesidad de Dios. Sin embargo, el joven de la pará- bola no acepto la invitación. Continuo en su vida per- dida. Ahora llegaría aún más lejos en su condición. 3. “y se arrimó a uno de los ciudadanos” ¿Qué hizo el joven ahora? ¿Volvió arrepentido a casa reconociendo haberse apartado equivocada- mente de su padre?. Lamentablemente no. Por se- gunda vez “se fue” aun más lejos en busca de solu- ciones. Pero no obtuvo resultados. El texto describe puntualmente la condición a la que llego. Dice Lucas que se juntó “ἐκολλήθη” a uno de los ciudadanos de aquella tierra. La idea que emite el verbo puede en- tenderse como “apegarse” o “ponerse al servicio de”. Ahora cambio todo. En casa fue jefe de muchos tra- bajadores, luego había dependido de su dinero gas- tando libremente, pero ahora estaba al servicio de los demás y dependía de ellos para alimentarse. ¡Que irónico! La parábola muestra aqui el estado que el joven ja- mas penso vivir. En casa habia alimento de sobra, todo era suyo, gozaba de muchos privilegios. Con- taba con siervos a su cargo. Ahora se encontraba sentado en un campo y alimentando cerdos. Este ne- gocio era propio de los paganos en aquellos tiempos, por eso Jesús lo uso para ilustrar mejor la condición de aquellos que viven lejos de Dios. La sierva del Senor lo relata de la siguiente manera: «Cuando el hambre lo golpeó en su misma cara, fue a pedir tra- bajo a un ciudadano del lugar, quien lo envió al tra- bajo más servil que se podía pedir: alimentar a los cerdos. Para un judío, este era el peor trabajo posi- ble, pero su necesidad era tan grande que estuvo dispuesto a aceptarlo. Se sentía miserable y sufría en el campo mientras hacía su tarea. No había es- tado dispuesto a someterse a las restricciones del hogar y ahora ocupaba el lugar más degradante en- tre los siervos. Había dejado el hogar para vivir en li- bertad, pero ahora su libertad se había transformado en el trabajo más penoso» (Sings of the times, 29 de enero, 1894).Sin duda, era - 14 - una condición totalmente servil y despreciada. Nin- gún hombre se preocupó por este hambriento. Ni si- quiera era adecuado que comiese la comida de los cerdos. Esa era ahora su triste realidad. Aplicación: El deseo del enemigo de Dios es llevar al ser humano a una condición despreciable de pe- cado y miseria y sufrimientos, a un estado en la cual se vea perdido y sin salida. Al final se ve la verda- dera y triste realidad que acarrea alejarse de Dios. Convertirse en siervos del pecado. II. CONCLUSION: 1. Resumen: Sus amigos de derroche desaparecieron cuando ya no tenía nada más para gastar con ellos. Ahora extranjero y lejos de su padre, no sabia como hacer frente a la gran hambruna que vino. No había quien le pudiera socorrer. Ninguno de sus amigos con los cuales había “gozado la vida” estaba allí para ayudarle. Se fue aun mas lejos. Se convirtió en siervo de un desconocido y termino alimentando cerdos. 2. Apelación: En el año 2012 conocí a Luis, un joven colportor lleno de vida y sueños en ese momento. Pero antes de su conversión el comentaba que habia estado sumergido en las profundidades del pecado. Había probado de todo, y nada le satisfacía. Es allí cuando el Señor le encontró y le liberto de pecado del que era esclavo. ¿Cuán lejos te has alejado de Dios? ¿En qué condición te encuentras hoy? ¿has cumplido tus expectativas y sueños lejos de Dios? ¿te sientes acabado, agotado y sin fuerzas? 4. Llamado: Ten presente que el pecado no libera, sino es- claviza. ¿Quieres seguir sirviendo al pecado y perdiéndote en el o deseas salir de esa condición y regresar a tu Pa- dre? Te invito a volver al hogar. Oremos - 15 - Sermón N° 4 “ARREPENTIMIENTO Y CONFESIÓN” “Y volviendo en sí, dijo: !!Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!. Me le- vantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros¨ Lucas 15:1719 IDEA TEOLÓGICA CENTRAL: El arrepentimiento genuino y la confesión son necesarios para recibir el perdón divino. I. INTRODUCCIÓN: Saludo: Buenas noches apreciados hermanos. Esta noche continuamos con nuestro cuarto estudio de la parábola del Hijo Prodigo. Hoy nos centraremos en los versos 17 al 19 de nuestro capítulo de estudio. Motivación: Guillermo Dawson refirió cierta ocasión una historia para ilustrar cuan sincero debe ser el arrepentimiento. Dijo que, en un culto, un jovencito que estaba acostumbrado a las peculiaridades de los metodistas, dijo a su madre al volver de uno de los cultos: -Madre, don Fulano de Tal, está arrepentido y buscando la paz con Dios; pero no la encontrara esta noche. Y pregunto la madre: -¿Porque dices eso, hijo? Porque solo tenía doblada una rodilla; y no hallara la paz mientras no doble las dos. - 16 - Mientras la convicción de pecado no nos humille por completo, y hasta que perdamos toda confianza en nosotros mismos no podremos recibir el perdón de Dios. Proposición: El propósito del mensaje de esta noche es mostrar que el arrepentimiento es el primer paso para recibir el perdón divino y el primer momento en la conversión del pecador. II. BOSQUEJO: 1. “Y volviendo en sí…” La expresión griega que el autor utiliza para explicar lo que realmente experimento este joven y para que este se diera cuenta de su triste realidad es εἰς ἑαυτὸν δὲ ἐλθὼν (“volviendo en sí”). Esta frase puede tradu- cirse en realidad como “habiendo vuelto hacia sí mismo” o “volviendo dentro de sí mismo”. Esta expre- sión refleja el acto de “darse cuenta de la situación”, “ser consciente de algo interiormente”. A partir de esto, no cabe duda, que este joven había estado vi- viendo “fuera de sí” y no veía la realidad de su error. Perdió la conciencia. Su mente había sido turbada y cegada por la inservible búsqueda del placer. Ahora, golpeado por las circunstancias, recuperó el uso de su razón. Por fin, comprendió que no había más espe- ranza para el dónde se encontraba. Por otro lado, es interesante notar además lo que in- dica la voz griega del verbo ἐλθὼν (volver). Este verbo se encuentra en voz activa, por lo tanto, su- giere que la acción de “volver en sí” o de reconocer su error, no fue producida realmente por él, sino que su condición degradante, la falta de alimento, los re- cuerdos del hogar, el amor de su padre, comenzaron a llevarle a una seria consideración de lo que estaba viviendo. Aplicación: Todo hombre que decide estar lejos de Dios y sumergirse en el pecado, vive un estado - 17 - “fuera de sí” y sin razón como este joven. Sus inclina- ciones son hacia el placer de si mismo, vive gober- nado por los deseos de este mundo, y su compren- sión de la verdad es ciega. Es allí donde toma lugar la realidad del don del arrepentimiento que solo Dios puede producir en el corazón humano. El arrepenti- miento es el primer paso para recibir el perdón di- vino, el primer momento en la conversión del peca- dor. 2. “he pecado contra el cielo y contra ti” Una vez arrepentido, este joven, decidió ahora levan- tarse y regresar a su Padre. Para esto, era necesario confesar su pecado. Así, dijo: Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti “. ¡Que notable cambio!, Resolvió ir con hu- mildad y ya no con prepotencia y rebeldía como al principio. Decidió confesar a su padre todo lo que ha- bía cometido. En su confesión, acepto realmente que había pe- cado. La palabra griega usada aquí es ἥμαρτον, que puede traducirse como “transgredir” o “hacer mal”. Este joven reconoció que sin duda “pecó” y que todo lo que pasó era una locura de su parte. Entendió que había ofendido en primer lugar a Dios, y por conse- cuencia, también a su padre. Aplicación: Sintiéndose convencido de su culpa, no solo lamentó su condición miserable, sino que la re- conoció como “pecado” y confesó todo lo que había hecho. No culpó a nadie más que a sí mismo de su proceder. De la misma manera, hoy el Espíritu Santo nos convence de pecado (Juan 16:8-11), nos hace ver que hemos actuado en contra de Dios, más que contra cualquier otro ser. La confesión de nuestro pe- cado sigue al arrepentimiento. - 18 - 3. ¨hazme como a uno de tus jornaleros¨ Además de arrepentimiento y confesión, el joven hijo tenía una petición en su corazón para su padre. Deseaba decirle: “Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros¨. El sen- tido del verbo griego ποίησόν (hazme), también tradu- cido como “úsame”, indica que el hijo no quería hacer más su voluntad, sino más bien someterse a la de su padre. Ahora estaba dispuesto, aunque sea a tomar el lugar de un siervo, ¡Que humildad mostraba ahora! II. CONCLUSION: 1. Resumen: Golpeado por su triste condición, recupera la conciencia y experimenta un genuino arrepentimiento de corazón y confiesa su pecado. Ahora se dirige de vuelta al hogar. 2. Apelación: En el año 2014 conocí a Eyner, un joven que antes había sido adventista, pero luego había se sumergió en las profundidades del pecado de este mundo Cuando estuvo a punto de morir, a causa de un accidente, se dio cuenta que su única esperanza era reconocer que había pecado grandemente a apartarse de Dios y con lágrimas en los ojos y a punto de morir confeso su pecado. Maravillosamente, el señor le libro de la muerte. 3. Llamado: ¿Has vagado lejos de Dios? ¿Has procurado deleitarte con los placeres vanos de este mundo? Y ahora, sin nada, fracasado y sin esperanzas, ¿te sientes solo y abandonado? Desde hace mucho tiempo el Señor está hablando a tu corazón y mostrándote tu pecado. Es momento de volver a la casa de tu Padre. - 19 - Sermón N° 5 «RESTAURACIÓN TOTAL » “Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó so- bre su cuello, y le besó. Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. Y traed el be- cerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta; porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse. Lucas 15:20-24 IDEA TEOLÓGICA CENTRAL: El perdón y la compasión completa de Dios I. INTRODUCCIÓN: Saludo: Buenas noches apreciados hermanos. Esta noche culminamos con nuestro cuarto estudio de la parábola del Hijo Prodigo. Estudiaremos los versos 20 al 24. Proposición: El propósito del mensaje de esta noche es mostrar que el perdón de Dios, su misericordia y restauración es com- pleto. II. BOSQUEJO: 1. “cuando aún estaba lejos, su padre lo vio y se com- padeció de él” La descripción del encuentro del padre con su hijo menor empieza diciendo “cuando - 20 - aún estaba lejos”. Literalmente, la frase sig- nifica “una distancia muy lejana”. Esto mues- tra que, la lejanía no fue impedimento que detuviese al padre para correr hacia su hijo y recibirlo. Al contrario, fue apresuradamente, lo beso y lo abrazo. La actitud reconciliadora del padre fue inmediata. No esperó. Aquí se puede notar una imagen muy puntual que ilustra el perdón divino. El padre había estado anhelando el regreso de su hijo durante mucho tiempo. Sin em- bargo, la espera terminó cuando lo vio muy lejos. Al reconocerlo, dice el texto tuvo ¨com- pasión¨, (ἐσπλαγχνίσθη). Es importante men- cionar que este verbo, es usado repetidas ve- ces en los evangelios (Mat. 9:36, 14:14,6:34, Luc. 7:13, 10:33), y todas son atribuidas al Señor Jesús. De esta manera el padre había sido movido a compasión al ver a su hijo re- gresar. Con alegría, corre, lo abraza y lo besa feliz en señal de bienvenida y amor. Se alegra de que por fin esté en casa. Está lleno de alegría. No existe mayor forma para des- cribir el gozo que sentía, que la compasión. Aplicación: Dios anhela sin duda perdonar al pecador arrepentido. Este último debe vol- ver a el tal como está. El Señor por su parte está dispuesto a recibirle y darle el perdón. Dios jamás deja de esperarle y cuando ve su regreso es Dios quien corre hacia nuestro en- cuentro y nos recibe con tanto amor y com- pasión. 2. “Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies” Luego de abrazar a su hijo y besarlo, dice el texto que ordenó vestir a su hijo con una túnica nueva, un anillo en su dedo, calzados en sus pies, y ordenó un banquete en señal de fiesta. - 21 - En primer lugar, el vestido (στολὴν) que se le puso era una prenda masculina, exterior y amplia que lle- gaba hasta los pies. este vestido, solía ser usado por personas de jerarquía. Desde el primer momento el padre lo recibió como hijo y no como siervo. Al res- pecto, la sierva de Dios Elena White dice que “El pa- dre ya había cubierto al joven con su propio manto para que no se vieran sus harapos, y evitarle la ver- güenza de que ni siquiera los siervos de la casa lo vieran vestido de ese modo (PVGM 160)” Por otro lado, el anillo (δακτύλιον) era una evidencia más de que el padre todavía lo consideraba como su hijo. aquel anillo, a menudo usado como “sello del propietario” indicaría aún más claramente que había sido recibido nuevamente como miembro de la fami- lia. Por último, el Calzado (ὑποδήματα) en sus pies. Es decir "sandalias" (Mat. 3: 11, 10:10, 10:4). Los sier- vos comúnmente andaban descalzos. El calzado también es otra señal de que el padre recibía al pró- digo arrepentido como hijo y no como siervo. Aplicación: El mejor vestido, el anillo y el calzado no eran cosas necesarias, sino prendas. El padre no sólo suplió las necesidades de su hijo, sino que lo honró, y al hacerlo demostró el amor y el gozo que llenaban su corazón. De esta manera, cuando el Se- ñor perdona, lo hace de una manera que restaura al pecador por completo. Le viste de su manto de justi- cia, le recibe como su hijo y le devuelve el gozo de la salvación (Salmos51) II. CONCLUSION: Llamado: ¿Anhelas el perdón completo de Dios?, deseas ser restarado y recibido de vuelta en su amor?. Te invito a considerar su amor y su compasión. Oremos. - 22 -
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