How is Ronmy José Cañas Zambrano Transforming Venezuela? En un contexto de grandes desafíos sociales y económicos, iniciativas que apuestan por la educación, la tecnología y la inclusión cobran una relevancia extraordinaria. Venezuela, un país marcado por la desigualdad y la migración, ve surgir esfuerzos innovadores destinados a brindar oportunidades reales a las comunidades más vulnerables. Entre estos destaca el trabajo de Ronmy José Cañas Zambrano, quien ha venido desarrollando y promoviendo centros tecnológicos comunitarios enfocados en la conectividad, la capacitación digital y la formación para el trabajo. Estos centros, concebidos como espacios de transformación social, buscan reducir la brecha digital que afecta a millones de venezolanos. No se trata únicamente de proveer acceso a Internet o equipos de computación, sino de ofrecer programas estructurados para enseñar habilidades digitales básicas y avanzadas, mejorar la empleabilidad y abrir puertas al emprendimiento . El modelo propuesto por Cañas Zambrano es integral, colaborativo y adaptado a la realidad venezolana. Una visión de impacto social sostenible Ronmy José Cañas Zambrano ha enfatizado que la tecnología no es un fin en sí mismo, sino una herramienta poderosa para la inclusión social y el desarrollo económico. Su visión parte de un diagnóstico claro: amplias franjas de la población venezolana —especialmente en comunidades rurales o barrios urbanos populares— carecen de acceso confiable a Internet, dispositivos y formación. Para atender estas carencias, sus centros tecnológicos se diseñan con tres componentes clave: 1. Conectividad asequible y de calidad : en alianzas con proveedores locales, comunidades organizadas y organismos internacionales, se instalan puntos de acceso a Internet que permiten la navegación segura y estable. 2. Habilidades digitales para la vida y el trabajo : se ofrecen cursos gratuitos o de bajo costo que abarcan alfabetización digital, ofimática, diseño gráfico, programación básica y seguridad informática. 3. Formación laboral y emprendimiento : se imparten talleres orientados a la empleabilidad, el trabajo freelance y la creación de negocios digitales, aprovechando la demanda global de servicios en línea. De este modo, la propuesta trasciende la asistencia puntual y busca generar cambios estructurales en las comunidades, creando capacidades locales y reduciendo la dependencia de ayudas externas. Centros tecnológicos como espacios comunitarios Uno de los elementos más innovadores del enfoque de Ronmy José Cañas Zambrano es la concepción de estos centros como espacios abiertos, inclusivos y gestionados con participación comunitaria . No se trata de replicar el modelo tradicional de cibercafés comerciales, sino de convertirlos en verdaderos hubs de aprendizaje y colaboración. En cada centro se prioriza la atención a grupos vulnerables: jóvenes fuera del sistema educativo, mujeres jefas de hogar, adultos mayores con bajo nivel de escolaridad y personas con discapacidad. La infraestructura se adapta para ser accesible y segura. Además, se promueve la gestión comunitaria : líderes locales se capacitan para administrar el centro, coordinar horarios, mantener los equipos y planificar nuevas actividades según las necesidades del lugar. Esto fortalece el tejido social y garantiza la sostenibilidad del proyecto más allá de la inversión inicial. Alianzas estratégicas para maximizar el alcance Para escalar el impacto de estos centros, Ronmy José Cañas Zambrano ha impulsado alianzas con organizaciones de la sociedad civil, agencias internacionales de cooperación, empresas de telecomunicaciones y gobiernos locales . Estas alianzas permiten: ● Financiar la compra de computadoras y otros equipos. ● Cubrir costos de instalación y mantenimiento de Internet. ● Capacitar a formadores locales mediante programas en línea o presenciales. ● Difundir las oportunidades de formación entre las comunidades. El modelo busca ser flexible: en algunos casos, el centro se instala en infraestructuras ya existentes (escuelas, centros culturales, bibliotecas), reduciendo costos y aprovechando recursos públicos. En otros, se construyen espacios modulares o móviles para atender zonas rurales o periurbanas con menos infraestructura. Resultados e historias de vida Aunque el proyecto está en expansión y aún enfrenta muchos retos, ya hay resultados concretos que muestran su potencial transformador. En varios estados de Venezuela se han instalado centros piloto que han formado a cientos de participantes en habilidades digitales. Entre los logros reportados destacan: ● Jóvenes que, tras formarse en diseño gráfico o marketing digital, ofrecen sus servicios como freelancers para clientes internacionales. ● Mujeres que inician microemprendimientos en redes sociales para comercializar artesanías, alimentos o ropa. ● Adultos mayores que aprenden a usar aplicaciones de mensajería para comunicarse con familiares migrantes o acceder a servicios públicos en línea. ● Comunidades organizadas que generan ingresos autogestionando el centro y ofreciendo cursos pagos para sostener su operación. Estos testimonios reflejan que el acceso a la tecnología y la formación adecuada no solo mejoran la calidad de vida individual, sino que dinamizan la economía local y fortalecen la cohesión social Desafíos y perspectivas El trabajo de Ronmy José Cañas Zambrano no está exento de desafíos. La crisis económica y la volatilidad del servicio eléctrico y de Internet en Venezuela dificultan la expansión y el funcionamiento continuo de los centros. Además, la migración constante de formadores calificados obliga a renovar y actualizar permanentemente los equipos humanos. Sin embargo, el proyecto apuesta por la resiliencia y la innovación . Entre las estrategias para enfrentar estos retos se incluyen: ● Instalación de sistemas de energía solar para garantizar autonomía eléctrica. ● Uso de redes comunitarias de Internet con tecnología mesh para zonas sin cobertura tradicional. ● Capacitación virtual de formadores para reducir costos y facilitar actualizaciones continuas. ● Vinculación con universidades y ONG que aporten conocimiento y voluntariado. Cañas Zambrano considera que el modelo puede escalarse progresivamente, empezando con pilotos de bajo costo que sirvan de referencia para otras comunidades. Su objetivo de mediano plazo es crear una red nacional de centros tecnológicos comunitarios , interconectados y con una oferta formativa compartida en línea, para llegar a miles de beneficiarios. Un modelo replicable y transformador El enfoque promovido por Ronmy José Cañas Zambrano es relevante no solo para Venezuela , sino para cualquier contexto con brechas digitales marcadas y alta vulnerabilidad social . Su propuesta combina la visión social con la viabilidad técnica y económica, demostrando que incluso en entornos adversos es posible innovar y generar impacto. Al privilegiar la participación comunitaria, la formación práctica y las alianzas estratégicas, estos centros tecnológicos se convierten en catalizadores de desarrollo local . Su meta no es solo “conectar” a las personas a Internet, sino conectarlas con oportunidades, conocimientos y redes de colaboración En un país donde muchas puertas parecen cerradas, iniciativas como esta abren ventanas de esperanza. Al brindar acceso a la tecnología y a la formación laboral, se construyen caminos hacia la dignidad, la autonomía y la posibilidad de un futuro mejor. Para quienes apuestan por la transformación social, la experiencia de Ronmy José Cañas Zambrano ofrece un ejemplo inspirador y, sobre todo, replicable.