La historia de una empresa familiar La historia de una empresa familiar Edición Limitada: Noviembre 2024 Copia / 2.500 Diseño gráfico: Cincel Design María Teresa Pérez Ojeda Clara Larraín Zegers María Teresa Joannon Ovalle Periodismo: Las Editoras Ana María Baraona Desirée Ibarra Fotógrafo : Cristóbal Marambio Impresión : Ograma © VAIN S.A La historia de una empresa familiar Índice 9 21 41 133 140 170 218 246 266 277 287 Cartas Historia Bitácora Sello Somos Legado Presencia Álbum Gracias Recuerdos Glosario 8 9 Si estás leyendo esta carta, es que tienes en tus ma- nos nuestro libro conmemorativo de los 30 años de VAIN, nuestra primera empresa familiar constituida sin socios externos. Con esta recopilación de nuestra his- toria queremos dejar un testimonio del aporte que to- dos juntos hemos sido capaces de hacer para satisfacer la imperante necesidad de vivienda de los sectores de menores recursos. Hasta hoy, hemos contribuido a que más de 35.000 fami- lias de bajos recursos hayan accedido a la propiedad de una vivienda digna, en los diversos países en que nos desarrollamos. Cada una de ellas, luego se transforma, por mérito de quienes la habitan, en su hogar familiar. Este aporte realizado por nuestras empresas familiares a la sociedad no habría sido posible sin el apoyo de muchas personas e instituciones, entre las cuales te encuentras tú. Por esto que lo comparto contigo y espero contar con tu apoyo para lograr juntos el objetivo de que toda la obra realizada realmente nos trascienda y se proyecte por muchos años más. Al mirar hacia atrás, es válido preguntarse: ¿Cómo hi- cimos para llegar hasta acá, con el gran aporte reali- zado a la sociedad y diversificándonos para estar pre- sentes hoy en seis países? Debo confesar que, a inicios del año 1994, cuando junto con María Inés, mi esposa y “socia en toda mi vida”, tomamos la decisión de formar nuestra primera empresa sin socios externos a la familia (luego de 13 años de trabajar con diversas compañías cuya propiedad compartíamos con otros profesionales), no planificamos ni nos imaginamos a dónde llegaríamos. Fueron muchos eventos circunstanciales, administrados de forma adecuada, la fe y el trabajo duro, los que nos llevaron hasta donde estamos hoy. Carta Ernesto Valle Velarde La obsesión de nuestras empresas, de procurar alcanzar siempre la más alta Productividad, no corresponde a un afán de tener más para atesorar. Nuestra familia considera que obtener la más alta Productividad posible es una obligación moral que toda persona debe tener. De izquierda a derecha: Andrea y Rodrigo Valle Eguren, Ernesto Valle Velarde, María Inés Eguren y Mariana Valle Eguren, 2024. 10 11 Como dice el poeta Machado: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”. Muchos años más tarde nuestros hijos, conforme han ter- minado su formación universitaria, se han sumado a la empresa familiar, para colaborar cada uno desde sus ta- lentos y hacer de ella una empresa más joven y grande, incorporando sus nuevas perspectivas de ver las cosas. Considero prudente señalar en este momento que el lo- gro de nuestras empresas hasta hoy se funda básicamen- te en la entrega de viviendas económicas que construi- mos día a día, bajo un enfoque absolutamente distinto al del mercado general. Esta perspectiva no es una invención nuestra, es una simple adaptación de cómo otras industrias han alcanzado en el pasado altos ni- veles de Productividad. La obsesión de nuestras empresas, de procurar alcanzar siempre la más alta Productividad, no corresponde a un afán de tener más para atesorar. Nuestra familia con- sidera que obtener la más alta Productividad posible es una obligación moral que toda persona debe tener. Esto implica el compromiso de que cada vez que hace- mos un producto o entregamos un servicio, usemos es- trictamente lo necesario; de lo contrario, le restamos al mundo valiosos recursos que podrían emplearse para otro fin y hacemos trabajar más a nuestros colaborado- res, todo lo cual, finalmente, hace que nuestro produc- to o servicio sea más caro; es decir, de más difícil acceso para muchas personas. Nuestro mérito está en guiar y sostener en el tiempo ese nuevo enfoque de construir viviendas económicas, de una forma absolutamente diferente a como actúan en el mundo la mayor parte de las constructoras e inmobi- liarias “tradicionales”, las que desarrollan su acti- vidad proyecto a proyecto. Nuestro estilo particular apunta a trabajar bajo el esquema de una “Fábrica de Vivienda Económica”. Esto implica que (i) hemos definido un reducido número de productos, a entregar a un determinado segmento del mercado, en una plaza con una necesidad insatisfecha efectiva muy alta. (ii) En esa plaza hemos montado una Línea de Producción Continua en el tiempo, con proce- sos de transformación muy bien definidos y estudiados en profundidad, que se realizan con la secuencia y sincronización requerida. (iii) Trabajamos con cola- boradores permanentes y realmente especializados en lo que hacen (no temporales por obra), orientados en la Mejora Continua. (iv) A ellos la empresa les pro- porciona los mejores equipos y maquinarias para lograr una alta Productividad en su operación diaria. (v) Y les comparte parte del resultado final de la operación. (vi) Todo lo anterior es complementado por una per- manente presencia en terreno de todas las Gerencias de la Empresa, pues ahí es donde tiene lugar nuestra transformación y están los problemas a resolver. Estoy convencido de que nuestras empresas familiares nunca habrían podido llegar a ser lo que son sin el duro y continuo trabajo de nuestros colaboradores de producción, técnicos, jefes y profesionales de obra, así como de los equipos profesionales de apoyo en te- rreno; el soporte técnico, logístico, administrativo, financiero, legal y de sistemas de información de nues- tra oficina central, y de quienes finalmente son respon- sables de comercializar las viviendas que entregamos al mercado directamente. Hoy somos del orden de 1.500 personas en seis países, que aportamos lo mejor de cada uno de nosotros, para día a día lograr entregar 2.500 viviendas anuales y así contribuir a lograr un mundo mejor para todos. Por el logro antes descrito, a todos nuestros cola- boradores directos , así como a quienes en el pasado colaboraron con nosotros –y que hoy ya no nos acompa- ñan–, les quiero entregar los más sinceros agradeci- mientos de mi familia por el esfuerzo que aportan día a día con su labor. Nuestras empresas familiares se caracterizan por desa- rrollarse mediante la formación de empresas específicas para la ejecución y comercializacion de cada proyecto. Por medio de ellas compartimos nuestro desafío empre- sarial con un selecto grupo de socios de largo plazo en cada país donde estamos presentes, ellos, además de confiar en nosotros, comparten su experiencia y nos brindan una perspectiva más amplia que nos permite y exige una mejora continua en nuestro desempeño. A ustedes, nuestros socios empresariales , los más sin- ceros agradecimientos de mi familia, por la confianza que depositan en nosotros y los conocimientos que nos aportan para mejorar nuestro desempeño. Dada la naturaleza de nuestras operaciones, y el gran capital de trabajo que se requiere para su desarrollo, los bancos cumplen un rol fundamental en el logro de nuestros objetivos. Ellos nos apoyan con su confianza y brindan temporalmente los ingentes recursos de capi- tal de trabajo que requieren nuestras operaciones, así como las garantías que eventualmente debemos entregar a diversos organismos. Con ellos siempre buscamos una relación de largo plazo dentro de nuestro concepto de Fábrica. A ustedes, nuestros socios financieros de ayer y hoy , los más sinceros agradecimientos de mi familia, por la confianza que depositan en nosotros y el gran servicio que nos brindan. 12 13 Como toda actividad de Producción, para su desarrollo requerimos de diferentes servicios profesionales, así como del suministro de bienes, para lo cual nos apoya- mos en diversos profesionales y proveedores. Con ellos también siempre buscamos una relación de largo plazo dentro de nuestro concepto de Fábrica, más allá que “aventuras” proyecto a proyecto. A ustedes, nuestros socios profesionales y proveedores de ayer y hoy , los más sinceros agradecimientos de mi familia, por el esfuerzo que realizan por entregarnos la mejor calidad de servicios y suministros en cada una de sus áreas y cumplir con los exigentes plazos dentro de los que se desarrolla nuestra actividad. Finalmente, para llevar adelante satisfactoriamente nuestra actividad hay otro actor muy relevante, que pocas veces es reconocido, sin embargo, su aporte es fundamental para lograr nuestra colaboración como em- presa a la sociedad: me refiero al funcionario de las diferentes dependencias públicas y privadas con las cuales permanentemente debemos interactuar. Su profe- sional y oportuno desempeño es indispensable para al- canzar nuestra misión. A todos ellos les debemos también los más sinceros agradecimientos de mi familia. Como has podido apreciar, es muy larga la lista de los diversos actores que participan para que nuestras em- presas familiares puedan finalmente cumplir con entre- gar las mejores viviendas económicas posibles, en las diversas ciudades donde desarrollamos nuestras opera- ciones. El logro alcanzado a la fecha por nuestras empresas familiares, y lo que venga en el futuro, corresponde al esfuerzo de muchas personas y organizaciones, entre las cuales estás tú. Por ello, una vez más, gracias a ti en forma personal. Si bien lo logrado corresponde al esfuerzo de muchas personas, debo señalar que dichos resultados no hubie- ran sido posibles sin el particular enfoque de “Fábrica de Vivienda Económica”, así como de los Principios que nos inspiran, dentro de los cuales podemos destacar: I. Entregar siempre lo mejor de uno mismo en todo lo que hacemos, sin esperar recompensa alguna; en otras palabras, actuar con Amor . Lo anterior im- plica que en la vida lo más importante es hacer las cosas bien, por sobre la eventual retribución que podamos obtener. II. Atreverse a tomar las decisiones necesarias para avanzar en búsqueda del bien común; es decir, ser Responsables de lo que hacemos, de lo que pasa en “Tratar a los demás como desearías ser tratado”. Mt 7:12 nuestra vida, sin temor a equivocarnos, pues quien no arriesga cuando decide, nunca avanza. Ser Res- ponsable puede implicar algunas veces corregir lo hecho y aceptar una mala decisión tomada con sus respectivas consecuencias, para así poder lograr realmente el resultado buscado. Asimismo, ser Responsable conlleva en algunas oca- siones hacer cosas que no son de nuestro agrado o nos cuestan sacrificios. Hacer Responsables de nuestros actos a terceros, una actitud muy corriente, corresponde realmente al pecado original de la humanidad, que sume a muchos en la frustración, sufrimiento y tristeza. III. Usar la menor cantidad de recursos posibles para alcanzar los resultados que se pretenden, sin afectar la calidad de lo que se entrega. Es decir, buscar siempre la mayor Productividad posible. Nunca “dormirse en los laureles de lo alcanzado”, siempre es posible hacer algo más para lograr algo mejor. Este afán de emplear la menor cantidad de recursos corresponde a la Responsabilidad de pro- tegerlos para lograr un mundo mejor hoy y preser- varlo para las futuras generaciones. IV. Analizar en profundidad cómo lograr nuestros ob- jetivos y replantearse si existe una mejor forma de llegar a ellos. Orientarse incansablemente a la Mejora Continua. Nunca hay que quedarse plenamen- te satisfecho con lo alcanzado, siempre se puede hacer mejor. V. No somos dueños de nada: “Sin nada llegamos a este mundo y sin nada nos iremos de él”. Solo somos simples administradores de lo que por la Divi- na Providencia nos ha tocado poseer en la vida y nuestro deber es devolverle más de lo que reci- bimos de ella, tal como lo señala la parábola de los talentos Mt15:14-30. De nada sirve atesorar en esta vida Mt6:19. VI. En consecuencia con lo anterior, siempre debemos buscar compartir de la mejor forma posible, con todos los actores involucrados en nuestro queha- cer, los resultados de los bienes que nos toca administrar en este mundo. 14 15 En resumen, lo que nos guía es: “Tratar a los demás como desearías ser tratado”. Mt7:12. En las siguientes páginas está plasmada nuestra histo- ria, desde antes de que VAIN se constituyera, hasta el día de hoy. Cumplimos 30 años con una visión clara de lo que queremos para el futuro. Tenemos muchos proyectos que nos permitirán avanzar bajo nuestro enfoque de “Fábrica”. El objetivo de nuestra familia, en la medida en que el mercado lo soporte y estemos debidamente prepara- dos para ello, es llegar a operar con cuatro Líneas de Producción en cada ciudad donde estemos presentes. No puedo terminar estas líneas sin agradecer a mi fa- milia, quienes sin duda influyeron en mi formación per- sonal de manera determinante. También agradecer a to- dos mis amigos, profesores y compañeros de posgrado, de universidad y de colegio; así como a todas aquellas personas con quienes me he relacionado y aportaron a lo que finalmente soy hoy. Lo alcanzado por nuestras empresas familiares es en parte producto de ello. Debo destacar el permanente y decido apoyo de María Inés en todo lo que hemos emprendido juntos en nues- tros 43 años de matrimonio y de vida empresarial. Agradezco, además, la comprensión y consejos de mis hijos, quienes día a día asumen mayores responsabili- dades para continuar las empresas familiares, que fi- nalmente son el resultado del aporte de todos los que se han vinculado con ellas de una forma u otra. Gracias por tu atención a estas líneas, te invito a conocernos más y a disfrutar de este documento. Ernesto Valle Velarde. Marzo 4, 2024 16 17 Para mí es una gran alegría poder escribir estas lí- neas. Han pasado 30 años desde que partimos en esta aventura, cuando solo éramos tres personas en la oficina central, y nos costó un año obtener el primer contrato. Han sido 30 años de aprendizaje, de vivir miles de mo- mentos intensos, algunos muy alegres y otros muy tris- tes, pero acá estamos todavía al pie del cañón y con la misma disposición de siempre. Hemos crecido increíble- mente, ahora somos más de 800 colaboradores en Chile, entre ellos también parte de la familia acompañándonos. Estoy convencida de que cada incorporación a la empre- sa significa un aporte siempre, de diferentes maneras, que nos ayuda a crecer, a enfrentar otras realidades, a plantearnos cosas nuevas, aunque sea difícil, porque pensamos que lo que hacemos está muy bien. Diría que partí de cero. Cómo olvidar las primeras compras de equipos, los primeros contratos, los prime- ros pagos de IVA y tantas otras cosas más que tuve que aprender en el camino. Aún hoy surgen cosas nuevas, porque nunca se termina de aprender. Tengo muchos recuerdos de este largo camino, tantas anécdotas. La mayor alegría era ganar una obra, sal- tábamos de gozo cuando nos devolvían la Renta, ¡hasta tocábamos una campana cuando ocurría eso! Ni qué decir cuando alguien se casaba o nacía algún hijo: qué lin- dos recuerdos. Pero también hubo tristezas, cuando fallecía algún familiar, un amigo o un colaborador. Nos saltaban las lágrimas y los abrazos eran los que nos confortaban. Creo que lo más difícil en estos 30 años, desde mi punto de vista, fue la quiebra de Habitacoop. ¡Vaya que nos dejó enseñanzas! Nos quedamos sin obras, sin colaboradores, nos cobraron las boletas de garantía y el personal en la oficina se redujo al mínimo. Nun- ca podré terminar de agradecerles la disposición que tuvieron cuando se les comunicó que se les rebajaría el sueldo y trabajarían media jornada, pero siguieron trabajando jornada completa. O cuando le comunicaba a alguno que no teníamos saldo para pagarle su sueldo y Carta María Inés Eguren Corso 18 19 me respondía “no se preocupe, cuando pueda”. Para la familia fue duro también, pero aprendimos a vivir con austeridad y creo que ninguno de mis hijos se olvidará de esa etapa. Cómo no recordar a mi mamá, que nos ayu- dó en ese momento difícil. Finalmente logramos salir adelante, y ahora estamos acá. ¡Increíble! Siempre me preguntan si es difícil trabajar con la fa- milia y sí lo es. Hay que saber separar los momentos y los roles (saber quién es el que manda), y como suelo decir: hay que cerrar la puerta de la oficina y dejar los temas de la empresa, y al llegar a casa tomar los temas de la familia. Ahora que está de moda el tele- trabajo, es posible trabajar en la casa, pero sin in- terferir con los momentos familiares. Quiero destacar que el ingreso de nuestros hijos ha sido un aporte muy importante, una energía nueva con algunas ideas revo- lucionarias, y también un lugar donde apoyarse cuando las fuerzas van decayendo y los desafíos nos superan. Hace poco, para mi cumpleaños, me llegó un mensaje de felicitación de parte de “mi gente”, como les digo yo, los que están en el día a día en la oficina. Decía más o menos así: “Bajo su liderazgo hemos alcanzado gran- des logros y hemos aprendido valiosas lecciones...”. Leer esto me dejó un poco sorprendida, pero me di cuenta de que he dejado una marca en la vida de cada uno de ellos. Y como decimos en la empresa: “Da y recibirás”. Para terminar, solo quiero agradecer a Dios por la vida, a mi familia, a Ernesto, compañero de vida, a mis hijos Andrea, Rodrigo y Mariana, por su apoyo día a día, a sus cónyugues Leonardo y Pilar, y a mis nie- tos Vale, Felipe y Adolfo, que son la alegría de mi vida. Tambien a mis padres, por la formación recibida. Agradezco a todos los que pertenecen a esta gran fa- milia VAIN, a aquellos que alguna vez estuvieron en ella, y cómo no recordar con mucho cariño a los que ya no están. María Inés Eguren Corso María Inés Eguren y Ernesto Valle en su matrimonio el 29 de agosto de 1981, Arequipa, Perú. 20 21 Historia 22 23 VAIN es una empresa familiar dedicada a la construc- ción de viviendas económicas dignas. Nació en Chile en 1994, cuando se constituyeron las sociedades Inv. ARM Ltda. y VAIN S.A. Desde entonces opera en las oficinas de la calle Napoleón, en la comuna de Las Condes. Su historia se entreteje con la de la familia Valle Eguren. Ernesto Valle Velarde, su fundador, es inge- niero civil y empresario de origen boliviano, radicado en Chile desde hace 35 años. Él es el alma de VAIN y su sello distintivo es dirigir la compañía con trabajo duro y preocupación por las personas. Junto a él tra- bajan su mujer, María Inés Eguren, y sus hijos Andrea, Rodrigo y Mariana. Hoy, Ernesto cuenta con sus propias palabras el reco- rrido que precedió a estos 30 años de historia, lo que él llama la PREHISTORIA: “El inicio de todo se encuentra en el día que decidí estudiar Ingeniería Civil. El año 1976 yo estaba en tercer año de la carrera de Ingeniería de Minas, en la Universidad Católica del Perú, pero decidí cambiarme. Luego de visitar diversas operaciones mineras concluí que si bien dicha profesión era muy atractiva por su naturaleza, no me permitiría desarrollar la vida fa- miliar que proyectaba para mí. La decisión del cambio a Civil fue muy sencilla: era la opción en la que más cursos me convalidaban. Un semestre antes de terminar mis estudios fui contra- tado por la universidad para colaborar en el Laborato- rio de Mecánica de Suelos. A inicios de 1980, al con- cluir mis estudios, me contrató la empresa J. Tapia & J. Zubiate Ingenieros S.A. Ahí mi labor era supervisar Ensayos de albañilería de muros para proyecto de tesis para optar al título de Ingeniero Civil PUCP, Lima 1982 Constancia de trabajo en J. Tapia & J. Zubiate Ingenieros S.A., Lima 1981. Reseña Daniel Mardónez, Ernesto Valle y Gabriel Soto en obra. diversos proyectos, entre ellos, la construcción de 100 casas en el pueblo de Ccochaccasa, en la provincia de Huancavelica, a nueve horas de viaje en auto desde Lima, ciudad que visitaba cada tres semanas. La Compañía de Minas Buenaventura desarrolló Ccochac- casa como un pueblo autónomo, donde pudieran vivir sus colaboradores de la unidad minera Julcani, para estar cerca de las zonas de explotación minera. Fue en este proyecto en el que tuve mi primer contacto con una construcción ‘en serie y repetitiva’. A inicios de 1981, circunstancialmente dejé J. Tapia & J. Zubiate Ingenieros S.A. para incorporarme a otra empresa, en la que tendría la responsabilidad de lide- Ernesto Valle y sus amigos en PUCP, Lima 1978. Ernesto Valle en paseo a Marcahuasi, Perú 1978. Ernesto Valle asiste a un congreso de Ingeniería en México, 1985. 24 25 rar la construcción de un edificio de 12 pisos en Golf de San Isidro. En esta nueva labor solo alcancé a di- rigir la demolición de la casa donde se construiría el edificio y ejecutar las excavaciones para el subterrá- neo, pues, por diferencias insalvables con la direc- ción, renuncié en mayo de 1981. En ese entonces ya tenía todo listo para casarme con María Inés a fines de agosto. Por lo que busqué y con- seguí un nuevo trabajo con fecha de inicio para el mes de octubre. Es así como, a partir de mayo del 81, en mi condición de desempleado, empecé a visitar diversas obras de Lima, en las cuales trabajaban compañeros de universidad, experiencias que me permitieron aprender muchas cosas nuevas. En ese intertanto, Víctor Chávez, uno de mis compañe- ros, me preguntó si podía construir un baño de servi- cio en la casa de su suegro, a lo cual con mucho gusto dije que sí. Posteriormente, mi hermano mayor, Adolfo, me encargó la construcción de tres oficinas menores en el terreno de la antena de Radio Programas del Perú, en Chorrillos, y finalmente, el ingeniero Julio Vargas, profesor de la universidad que tenía una oficina de cálculo estructural –quien me permitía colaborar con él en sus diseños–, me invitó a construir seis aulas en el Colegio Los Reyes Rojos de Barranco para Alberto Benavides Ganoza, a lo cual también accedí. Obra: Casa en la Molina, Peru, 1981. Obra discoteca El Silencio Lima, 1984. De esta manera, a mediados del año 1981 iniciaba las dos etapas más fascinantes de mi vida: mi matrimonio y mi vida empresarial. Es evidente que debí renunciar al trabajo al cual me había comprometido a incorporarme en octubre de ese año. Para no iniciar mi vida empresarial solo, invité a unirse a esta aventura a cuatro compañeros de la uni- versidad. Javier Martín Arranz, mi compañero en el Colegio Maristas San Isidro desde kindergarten hasta quinto de secundaria, fue el primero en aceptar y de- cidimos formar entre los dos la nueva ‘empresa cons- tructora’. Dentro del entusiasmo inicial se sumaron posteriormente José Benavides y José Corso. Iniciamos operaciones con oficinas en la casa donde vivíamos con María Inés, en Barranco. Al poco andar comprobamos que la empresa no tenía cabida para cuatro profesionales, por lo que finalmente nos quedamos solo Javier y yo. Luego, cuando empezamos a contratar personal de apoyo, debimos trasladarnos a trabajar a la zona de servicio y garaje de la casa de mi madre en Miraflores, sector que le alquilamos como oficina. Los bajones de trabajo siempre ocurren en la cons- trucción y en 1984 se produjo uno de ellos. La empresa ya no daba para que siguiéramos los dos socios en la misma. Por casualidades de la vida, ese mismo año fui admitido para estudiar un magíster en Administración en la Universidad del Pacífico de Lima. Luego de tratar breve y amigablemente el tema con Javier, llegamos a un acuerdo en forma rápida y le compré su participa- ción en la empresa. Ernesto Valle en el discurso de graduación de su MBA en la Universidad del Pacífico de Lima, 1988. Obra: Auditorio y aulas Universidad Peruana Cayetano Heredia, Lima, 1984. Ernesto Valle trabajando en el comedor de la casa de Miraflores. 26 27 La situación general en los años siguientes no mejoró mucho. A contar de 1987 empezó a ponerse muy, pero muy difícil. Es así como, a inicios de 1988, cuando termi- né mis estudios de magíster, decidimos con María Inés dejar el Perú. Nuestro primer plan fue irnos a Estados Unidos a estudiar un doctorado, ya que siempre ejercí como profesor por horas en la universidad, por lo que podía ser un camino no tan difícil de recorrer. Como profesor tenía un acuerdo con el decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica de Perú, ingeniero Fernando Giuffra, de ’canjear’ mis re- muneraciones por pasajes para viajar a congresos in- ternacionales de ingeniería, sistema con el cual pude participar en diversos eventos en Argentina, Brasil, Chile y México. Es así que durante la tercera semana de octubre de 1988 tuvo lugar un Congreso de Hormi- gones en Chile, al cual asistí. Durante esos días en Santiago me encontré con el ingeniero Jorge Zubiate, mi primer jefe, y nos reunimos a tomar desayuno. Él me contó que un amigo suyo tenía un terreno para cons- truir 25 departamentos en la calle Pocuro, en Provi- dencia, y que requería socios con capital para mate- rializar su proyecto. De regreso a Lima le consulté a María Inés si cambia- ría Estados Unidos por Chile y me dijo que sí. Inme- diatamente contacté a Jorge y le dije que contara con- migo para el desarrollo del proyecto en Chile, y que podía aportar US$120 mil para la construcción, con la condición de que fuera yo el profesional responsable de la obra. Jorge integró al proyecto a los ingenieros Julio Var- gas, Adolfo Carozzo y a Ricardo Palacios. Los cinco partimos la última semana de noviembre de 1988 a San- tiago y sellamos el acuerdo para la construcción del edificio con Daniel Lowener. Derecha: Andrea en obra de edificio Pocuro, Providencia, 1990. Izquierda: María Inés, Andrea y Rodrigo, junto a Rocío Palacios en su llegada a Chile, 1989. Ernesto Valle en congreso panamericano de mecánica de suelos, Lima 1979. Me trasladé a Chile el 6 de enero de 1989. María Inés se quedó en Lima, pues estaba esperando a nuestro se- gundo hijo, Rodrigo, quien nació en Perú en mayo de ese año. Nuestra empresa en Perú terminó sus obras a cargo de nuestro profesional de aquel entonces, el in- geniero Manuel Ato, y con el apoyo administrativo de mi hermano menor, Raúl. La construcción del edifico de calle Pocuro partió en octubre de 1989 y concluyó en septiembre de 1990, el mismo año que asumió la presidencia de Chile don Pa- tricio Aylwin. Su ministro de Hacienda, Alejandro Foxley, optó por ‘enfriar la economía’, con lo que la tasa hipotecaria llegó al 18% anual en UF. Como es evidente, a esa tasa de interés nadie podía comprar una propiedad, por lo que parte del edificio terminó en arriendo. Finalmente, todo logró ser vendido sin pér- didas, pero tampoco con utilidades. Como es lógico, en ese entorno los inversionistas de Perú retiraron su capital de Chile y, como familia, debimos decidir si regresar a Perú o persistir en nuestra aventura. Optamos por quedarnos. Junto a Jaime Debarbieri, a quien conocí cuando traba- jé en el edificio de calle Pocuro, formamos la empresa D&V Ingenieros S.A., con la cual me inicié realmen- te en la construcción de la vivienda de bajo costo en 1991. La actividad de D&V Ingenieros se concentró en las ciudades de Chillán y Concepción, donde construi- mos diversos conjuntos de casas para la Cooperativa de Vivienda Habitacoop. A esta empresa se sumó José Corso en el año 1992 y, finalmente, a fines del año 1993 ven- dí mi participación, ya que mi visión empresarial era diferente a la de Jaime y José. Es así como en el primer trimestre del año 1994 se constituyeron las dos primeras sociedades ciento por ciento familiares: Inversiones ARM Ltda. y VAIN S.A.”. Rodrigo en brazos de su abuela materna Antonieta Corso - Cuca. Lima 1989. Primera versión del logo VAIN S.A. 28 29 Cronología 1994 PRIMER CONTRATO › En marzo de 1994 se constituyeron las sociedades Inversiones ARM Ltda. y VAIN S.A., las primeras empresas 100% familiares. › Se compró la oficina ubicada en Napoleón 3010, 51 A, en la comuna de Las Condes. El Padre Angelo Fiorese hizo una ceremonia para bendecir las nuevas oficinas. › Hacia fines de ese año se adjudicaron en trato directo los primeros contratos de construcción con la cooperativa de vivienda Habitacoop: Vegas de Nonguén 8, de 49 casas, y Vegas de Nonguén 9, de 48 departamentos, ambos en Concepción. › No se iniciaron obras en este año. 1992 - 1993 › Ernesto Valle, junto a Jaime Debarbieri, formaron la sociedad D & V Ingenieros S.A. para dedicarse a la construcción de viviendas económicas para Habitacoop, la cooperativa de viviendas más importante de Chile en esa época. › A finales de 1993, Ernesto Valle se retiró de la sociedad de D & V Ingenieros. 1995 PASO A “JUGAR A LAS LIGAS MAYORES” › Inicio de la construcción de Vegas de Nonguén 8 y 9 en Concepción. › En concurso oferta de Habitacoop, VAIN se adjudicó la construcción del proyecto Santa Laura, de 560 departamentos distribuidos en edificios de cinco pisos, en la comuna de Recoleta. COSAPI participa como asociado. › VAIN desarrolló su primer proyecto junto a Cornelio Saavedra y otros: Vista Hermosa, de 42 casas, en la comuna de Peñalolén. › Se adquirió el primer parque de equipos: Moldaje EFCO para cuatro departamentos, una grúa automontable Crono Flash 30, una planta de concreto IMER, un minicargador Mustang 2060. › Se inició una obra en Santiago de 42 casas y dos obras en Concepción de 97 casas. Andrea y Rodrigo en obra de D&V de casas en Chillán. 1993 Arriba: Andrea, Rodrigo y su abuela paterna, Mami Nati, en obra Manantiales, La Florida. Abajo: Mariana en obra. 1992 Permiso de edificación proyecto Pocuro, Providencia. 1990 1988 - 1991 › En 1988, la familia Valle Eguren decidió dejar Perú para migrar a Chile en busca de una mejor calidad de vida. Ernesto Valle arribó al país en enero de 1989; en julio se le unieron su esposa María Inés Eguren y sus hijos Andrea, de dos años, y Rodrigo, de dos meses. La tercera hija, Mariana, nació en Chile en el año 1991. › Luego de desarrollar tres proyectos inmobiliarios del sector medio-alto, optaron por buscar la manera de competir por precio y hacerse un espacio en el mercado de las viviendas económicas. 1996 PRIMER PROYECTO DE RENOVACIÓN URBANA DE SANTIAGO › Comenzó la construcción del proyecto Santa Laura. › En concurso oferta de Habitacoop, VAIN se adjudicó la construcción del proyecto Parque de los Reyes, de 242 departamentos, distribuidos en edificos de cinco y 21 pisos, en la comuna de Santiago. › Se adquirió equipo para obras en altura: una grúa Torre Potain y un elevador de personas Togar. › Se inició una obra en Santiago de 560 departamentos. Arriba:Bendición de Of. 51A, Padre Angelo y Ernesto Valle, Las Condes. Abajo: Contrato de construcción Vegas de Nonguén 8. 1994 Arriba: Vegas de Nonguén 8. Abajo: Obra edificios Vegas de Nonguén 9, Concepción. 1995 Arriba: Inauguración primera piedra, obra Santa Laura. Abajo: Primer lugar en adjudicación proyecto Parque de los Reyes, Santiago. 1996 30 31 Arriba: Planta de hormigón obra Parque de los Reyes, Santiago. Abajo: Parque de los Reyes, Santiago. 1997 Arriba: Obra Mirador de Ibsen, Valparaíso. Abajo: Maqueta proyecto Playa Ancha. 1998 Obra Ayinrehue II, Quinta Normal. 1999 1999 EL MUNDO SE AFECTÓ POR LA CRISIS ASIÁTICA › Habitacoop, el único mandante de VAIN en esa fecha, entró en insolvencia económica, lo que provocó una situación muy difícil para la empresa por la no cancelación de estados de pago y de retenciones del proyecto Parque de los Reyes, así como por la ejecución irregular de boletas de garantía. › VAIN desarrolló el proyecto Ayinrehue II en Quinta Normal, junto a Bautista Gritti y otros, de 120 departamentos. › Se inició una obra con 120 departamentos. 1997 › Comenzó la construcción del proyecto de viviendas Parque de los Reyes. › En trato directo con Habitacoop, VAIN se adjudicó la construcción del proyecto Mirador de Ibsen, de 110 departamentos, en Valparaíso. › Se adquirió equipo para hacer dos obras simultáneas: Moldaje EFCO para dos departamentos y segunda planta de hormigón Piccini. › Se inició una obra en Santiago de 242 departamentos. 1998 › Se inició la construcción de El Mirador de Ibsen. › En concurso oferta de Habitacoop se adjudicó la construcción del proyecto Playa Ancha en Valparaíso y, en trato directo, el proyecto Bulnes en Santiago. Ninguno de ellos llegó a ejecutarse. › Se inició una obra en Valparaíso de 110 departamentos. Arriba: Ernesto Valle, Marcela Miranda, María Inés Eguren y Alejandro Grez, colaboradores que nos apoyaron en la crisis y que siguen vigentes hasta ahora. Abajo: Obra Los Veleros, Macul. 2000 2000 PLAN DE EMERGENCIA › Para hacer frente a la crisis, la empresa comenzó a ofrecer servicios de construcción de viviendas económicas a terceros; la oficina central pasó a trabajar media jornada y se reprogramaron las obligaciones de pago. María Inés Eguren entregó en garantía al banco la casa familiar para respaldar las deudas originadas en la ejecución indebida de las boletas de garantía. › VAIN demandó arbitralmente a Habitacoop, que a su vez demandó penalmente a Ernesto Valle, acción que no prosperó por no tener fundamento. › VAIN obtuvo adjudicación en concurso para la construcción del proyecto Los Veleros en la comuna de Macul, con ANALCO (hoy Fortaleza). › Se constituyó Constructora ARM Ltda. › No se iniciaron obras en este año. Jardines de Aramburú, Surquillo, Lima. 2001 2001 SE EMPEZÓ A TRABAJAR EN PERÚ › VAIN construyó un único proyecto de 80 casas en El Monte para DEVISO. › Se inició en Perú, por parte de BESCO–COINSA, y con la asesoría de VAIN, el primer megacondominio del fondo Mivivienda, Jardines de Aramburú, en Surquillo, Lima. › Se iniciaron dos obras en Santiago con 227 unidades. 2002 ARBITRAJE CONTRA HABITACOOP GANADO › Habitacoop fue sentenciado a pagar UF 50.000. Sin embargo, la cooperativa quebró y no canceló el monto de la sentencia a la que fue obligada. › CYPCO y otros, al igual que Cornelio Saavedra y otros, contrataron los servicios de construcción de VAIN para los proyectos TerraViva 1 y Lourdes, respectivamente. › Se iniciaron dos obras en Santiago con 299 unidades. Obra TerraViva 1, Quinta Normal. 2002 32 33 2004 COMPRA DE TERRENOS PROPIOS POR VAIN › VAIN se decidió invertir todas las utilidades en la compra de terrenos para futuros proyectos propios, que aseguraran la continuidad de trabajo en el tiempo. › Se inició el desarrollo propio de los proyectos San Pablo 1 y San Ignacio 1. › Se construyó el proyecto Hermanos Carrera en Maipú para Fernando Tisné. › Se extendió el servicio de asesoría en Perú a la Constructora San José, para el Condominio del Aire. › Se iniciaron tres obras en Santiago con 350 departamentos. 2006 › Arturo Gana y otros contrataron la construcción de su único proyecto en conjunto, Santa Carmencita. › Se iniciaron cuatro obras en Santiago con 406 departamentos y dos en Concepción con 190 departamentos. 2003 VAIN LOGRÓ PAGAR TODAS SUS DEUDAS ORIGINADAS POR LA INSOLVENCIA DE HABITACOOP › CISS contrató los servicios de construcción de su primer proyecto con VAIN, Puerto de Palos. › VAIN construyó el proyecto Los Veleros 2 para ANALCO. › Continuaron los desarrollos junto a Bautista Gritti y otros, en las comunas de Quinta Normal y Pudahuel. › Se inició en Perú, por BESCO – COINSA y con la asesoría de VAIN, la segunda etapa del proyecto Jardines de Aramburú. › Se compraron dos grúas automontables adicionales Dalbe y dos plantas de hormigón Piccini. › Se iniciaron cuatro obras en Santiago con 431 departamentos y una en Concepción con 147 departamentos. 2005 PRIMER CONTRATO CON INMOBILIARIA ACONCAGUA › Inmobiliaria Aconcagua y SENEXCO contrataron la construcción de su primer proyecto con VAIN, San Francisco 1 y Quinta Avenida, respectivamente. › Se desarrolló, con CYPCO y otros, el primer proyecto en sociedad, TerraViva 2. › Se compró una grúa torre Dalbe Sky, un andamio cremallera bimástil PEC, una planta de hormigón Piccini y más moldaje EFCO. › Se iniciaron tres obras en Santiago con 333 departamentos y dos en Concepción con 204 departamentos. Condominio del Aire, San Luis, Lima. 2004 Arriba: Proyecto Dalcahue, Pudahuel. Abajo: Equipo de Dirección Puerto de Palos, Talcahuano. 2003 Arriba: Obra San Francisco, Puente Alto. Abajo: Portada San Sebastián, Concepción. 2005 Arriba: Parque de la Huaca en construcción, San Miguel, Lima. Abajo: Primer logo Inmobiliaria Todos los Santos. 2007 Parque Río, Concepción. 2006 2007 PRIMER PROYECTO 100% VAIN › Se desarrolló el primer proyecto 100% diseñado y propiedad de la familia: San Isidro. › Se constituyó la Inmobiliaria Todos los Santos. › Consorcio Nacional de Seguros contrató por primera vez -junto a Inmobiliaria Aconcagua- los servicios de construcción de VAIN para los proyectos Parque del Sol 1 y Concha y Toro. › En Perú, la Constructora San José extendió la asesoría de VAIN para la concepción, diseño, construcción y comercialización del proyecto Parque de la Huaca. › Se iniciaron seis obras en Santiago con 802 departamentos y tres en Concepción con 358 departamentos. Casas del Valle de Santa María, Hualpén. 2008 2008 › Se profundizó en el desarrollo de proyectos propios con 400 departamentos en San Ignacio 2, San Pablo 3 y San Isidro 2. › Se desarrolló, junto a Marcelo y Sergio Gritti, el proyecto Santa Rosa. › Se iniciaron siete obras en Santiago con 976 departamentos y una en Concepción con 106 unidades. 34 35 Moldaje muro Santa Teresa, Quilicura. 2008 2009 NUEVA CRISIS MUNDIAL › Mandantes suspendieron diversos proyectos en el contexto de la crisis subprime. › La familia Valle Eguren decidió sostener su modelo de fábrica y mantuvo su operación en cinco proyectos, con 650 departamentos sin financiamiento bancario. › Se construyó el primer proyecto en Concepción para Inmobiliaria Aconcagua y CNS. › Solo se construyeron tres proyectos para terceros, con 398 departamentos. › Se inició la inversión directa en Perú, junto a CLASEM, en los proyectos San Idelfonso de 1.478 casas y San Gabriel de 1.144 departamentos. › Se iniciaron seis obras en Santiago con 811 departamentos y dos en Concepción con 248. 2010 TERREMOTO 27/F › A causa del terremoto se dedicó una importante inversión y esfuerzo orientados a la reparación de los daños originados por el gran sismo. › La familia continuó con el desarrollo propio de 450 departamentos sin financiamiento bancario. › Solo se construyeron dos proyectos para terceros, con 290 departamentos. › Se inició en Perú la asociación con ENACORP para el proyecto Valle Verde, de 440 departamentos en Puente de Piedra, Lima. › Se iniciaron cuatro obras en Santiago con 472 departamentos y dos en Concepción con 290 departamentos. 2011 SE CONSOLIDÓ UN MODELO DE NEGOCIOS › VAIN desarrolló su “primer catálogo de productos” con valores estandarizados para trabajar proyectos en conjunto con sus potenciales socios. › Se desarrollaron los primeros proyectos en sociedad con CISS: Los Triunfadores y Terrazas de Collao 3. › La familia continuó con el desarrollo propio de 260 departamentos sin financiamiento bancario. › Se iniciaron dos obras en Santiago con 260 departamentos y dos en Concepción con 270 unidades. 2012 › Se realizó el primer proyecto en sociedad con Inmobiliaria Aconcagua, Santa Victoria 1, de 72 departamentos. › La familia Valle Eguren continuó con el desarrollo propio de 90 departamentos sin financiamiento bancario. › En Perú se constituyó la sociedad Valles del Perú con ENACORP y se construyó el proyecto Valle Alto, de 440 departamentos, en Puente de Piedra. › Se iniciaron tres obras en Santiago con 300 departamentos y una en Concepción con 130 unidades. Arriba: Santa Ester, La Pintana. Abajo: Valle Verde, Puente Piedra, Lima. 2010 Arriba: Moldaje subterráneo Collao 3, Concepción. Abajo: Los Triunfadores, Hualpén. 2011 Preparación de losa en Collao 4, Concepción. 2012 Arriba: Construcción de laguna Brasil Beach, Cuiabá. Abajo: Obra Villanova, Callao. 2013 Arriba: Catalina de Siena. Abajo: Challapampa Valle Blanco Reserva, Arequipa. 2014 2014 SE IMPLEMENTÓ QUINTA LÍNEA DE PRODUCCIÓN › Se desarrolló con CISS el primer proyecto DS19 en Santiago: San A